Tres supernovas en París

Nadal busca el récord de títulos (7).- Djokovic, ganar cuatro grandes seguidos.- Federer, ampliar la mejor marca en el Grand Slam (16)

Nadal golpea la pelota durante un entrenamiento.Christophe Ena (AP)

Hasta el suizo Roger Federer se queda con la boca abierta. “Asombroso”, dice cuando repasa todo lo que hay en juego en esta edición de Roland Garros, en la que debuta hoy (Canal+ y Telecinco) contra el alemán Tobias Kamke. Sobre la tierra roja, Rafael Nadal busca deshacer el empate a seis títulos parisienses que mantiene con el sueco Björn Borg. En el templo de la arcilla, Federer puede extender su marca de 16 grandes. El serbio Novak Djokovic intenta convertirse en el primer tenista que gana cuatro torneos del Grand Slam seguidos desde 1969 (el australiano Rod Laver). El objetivo del número u...

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Hasta el suizo Roger Federer se queda con la boca abierta. “Asombroso”, dice cuando repasa todo lo que hay en juego en esta edición de Roland Garros, en la que debuta hoy (Canal+ y Telecinco) contra el alemán Tobias Kamke. Sobre la tierra roja, Rafael Nadal busca deshacer el empate a seis títulos parisienses que mantiene con el sueco Björn Borg. En el templo de la arcilla, Federer puede extender su marca de 16 grandes. El serbio Novak Djokovic intenta convertirse en el primer tenista que gana cuatro torneos del Grand Slam seguidos desde 1969 (el australiano Rod Laver). El objetivo del número uno mundial, que hace un decenio habría estremecido los cimientos de su deporte, ya no asombra: si entre 1970 y 2005 solo el estadounidense Pete Sampras aspiró a lo mismo (1994), en los últimos seis años, Federer (2006 y 2007), Nadal (2011) y él (2012) lo han intentado. Lo excepcional, ganar tres grandes sucesivamente y asaltar el cuarto, ha pasado a ser algo frecuente. En la ciudad de la luz hay tres supernovas cegadoras.

“Los datos hablan por sí solos”, resume Nadal. “Estamos viviendo una época de muy alto nivel. No soy la persona adecuada para hablar de esto porque soy parte implicada y bajo ningún concepto querría sonar arrogante o hacer creer que pienso que estamos viviendo la época más difícil de la historia del tenis”, matiza. “Pero puedo hablar de números: dicen que durante años costó que los cuatro mejores estuvieran en semifinales frecuentemente y que, tras muchos años sin que eso pasase, ahora ocurre frecuentemente”, añade, sin olvidarse del británico Murray. “No se puede pensar que esto sucede porque el nivel medio de tenistas haya bajado, porque no hay nada en la vida que vaya hacia abajo. Los de arriba han sido muy sólidos y regulares”.

Los de arriba dejaron de ser solo tenistas hace tiempo. Sus duelos han hecho de ellos iconos globales. Primero llegó la final de Wimbledon 2008, Nadal ganando a Federer entre tinieblas. Luego, el partido decisivo del Abierto de Australia 2012, Djokovic tumbando a Nadal en el encuentro por el título más largo de la historia (5h53m). El público y los patrocinadores han reaccionado con entusiasmo a esos pulsos. Según pudo saber este diario, la ATP, organismo rector del tenis masculino, ha aumentado un 80% sus ingresos comerciales en los últimos tres años, los más duros de la crisis financiera mundial.

Gracias a los tres mejores, la ATP ha incrementado un 80% sus ingresos

Los torneos menores sufren duros recortes. Sin embargo, los más importantes, esos en los que sí están Djokovic, Nadal y Federer, viven una época dorada: en 2011, sumaron 6,5 millones de espectadores y se dispararon hasta los 785 millones a través de la televisión, un 45% más que en 2010. Hasta 16 torneos, sin contar los grandes, rompieron en 2011 su récord de espectadores. En un contexto económico tenebroso el circuito del tenis ha sumado cinco nuevos patrocinadores mundiales y se ha comprometido a aumentar progresivamente la bolsa de premios hasta 76 millones de euros, sin incluir los grandes, en 2014, con lo que esta habría aumentado casi un 20% y se marcaría un nuevo récord.

Djokovic, que hoy compite contra el italiano Starace, Nadal, que probablemente lo hará mañana contra el italiano Bolelli, y Federer, son un imán para las inversiones.

Los tres mejores, que suman 31 grandes y han conquistado 27 de los últimos 28 disputados (el argentino Del Potro ganó el Abierto de EE UU 2009), vuelven a batallar sobre arcilla. Son días a 30 grados en París, donde Fernando Verdasco ganó ayer 6-3, 6-2 y 7-6 al belga Darcis y Juan Carlos Ferrero 6-1, 6-4 y 6-3 al francés Dasnieres. El infierno que cae del cielo es agua helada en comparación con la temperatura del vestuario. Allí, los mejores se observan de reojo. Saben que lo que ocurra en París quedará para la historia.

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