Crónica:TENIS | La final de la Copa Davis

Australia gana la Copa Davis a España tras la victoria de Philippoussis sobre Ferrero

El tenista valenciano ha caído en cinco 'sets' en un partido que ha durado dos horas y 53 minutos

Australia ha ganado la final de la Copa Davis a España por 3-1 tras la victoria de Mark Philippoussis sobre Juan Carlos Ferrero por 7-5, 6-3, 1-6, 2-6 y 6-0. Ha sido un partido con alternativas en el que el español ha remontado dos sets, pero cuando tenía al australiano contra las cuerdas no le remató y sucumbió en el quinto. El sueño de ganar la segunda ensaladera se ha desvanecido.

Philippoussis, como jugador irregular que es, alternó al principio los saques directos con los pelotazos a la red, ya desde el primer juego, en el que Ferrero dispuso de dos bolas para romper ...

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Australia ha ganado la final de la Copa Davis a España por 3-1 tras la victoria de Mark Philippoussis sobre Juan Carlos Ferrero por 7-5, 6-3, 1-6, 2-6 y 6-0. Ha sido un partido con alternativas en el que el español ha remontado dos sets, pero cuando tenía al australiano contra las cuerdas no le remató y sucumbió en el quinto. El sueño de ganar la segunda ensaladera se ha desvanecido.

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Philippoussis, como jugador irregular que es, alternó al principio los saques directos con los pelotazos a la red, ya desde el primer juego, en el que Ferrero dispuso de dos bolas para romper el servicio de su rival. No lo hizo, algo que se repitió en el partido. Ferrero, como Moyà en la primera jornada, buscó restar a los pies del australiano, pero éste le mantuvo a distancia. Estaba claro que quien rompiera el saque ganaría el primer set. Ésa presión no la superó Ferrero en el duodécimo juego. El australiano se fue a la red con decisión, metió presión al español y ganó en el momento justo la primera manga por 7-5 en 47 minutos.

La igualdad prosiguió al comienzo de la segunda manga, aunque Ferrero tuvo que salvar una bola de break en el cuarto juego. El español dispuso de idéntica opción en el juego siguiente, pero el poderoso brazo del australiano lo evitó, capaz de conectar saques ganadores con el segundo servicio. Se escapó otra buena oportunidad y el español volvió a perder su servicio, esta vez en blanco, con lo que el jugador de Melbourne se colocó con un cómodo 5-3, para rematar el set con su incontestable saque. 6-3 en 41 minutos y el gesto cabizbajo de Ferrero, que negaba con la cabeza, lo decía todo.

Ferrero rompe el saque del australiano

El tenista de Ontinyent comenzó el tercer set ganando su saque. Una luz de esperanza llegó cuando, por fín, tras siete bolas de break, el valenciano rompió el saque de su rival, lo que le permitió situarse con 3-0 tras ganar de nuevo su servicio. El partido tenía otra pinta, Ferrero recuperó la sonrisa y el australiano comenzó a dar leves síntomas de debilidad. El español, embalado, volvió a romper el saque del australiano y se llevó el set por 6-1.

Menos fresco y con más dobles faltas, Philippoussis vio como su primer servicio ya no era tan efectivo. Empezó con titubeos y en el quinto juego un fallo en la red al volear y una doble falta le dieron el juego en blanco a Ferrero. El encuentro se había dado la vuelta como un calcetín. Ferrero volvió a romper el saque de su rival, que ya no sacaba ni por asomo como al principio, y se apuntó la cuarta manga por 6-2.

Tras unos minutos para estirar y cambiarse de camiseta, ambos jugadores iniciaron el último set. Todo indicaba que Ferrero, que venía desde atrás como un ciclón, se llevaría el partido. Pero no fue así. Philippoussis comenzó al saque, ganó su juego con facilidad y consciente de que sus opciones pasaban por presionar en la red al español, se la jugó y ganó. Rompió el saque de Ferrero, que erró un golpe desde el fondo de la pista en el peor momento. El partido viró otra vez, el australiano se puso con 3-0 y rompió el servicio de nuevo del español. La final de la Copa Davis tocaba a su fin. Ferrero había hecho lo más difícil, ganar dos sets, pero no tumbó a Philippoussis cuando éste pedía aire y acabó pagándolo muy caro, con un rosco en la última manga. El valenciano se va de esta final con dos derrotas por cinco sets y la sensación de haber estado a poco de ganar ambos partidos.

La alegría australiana se desbordó y ambos equipos decidieron no jugar el quinto partido. España se vuelve de Australia como en las dos anteriores finales, en 1965 y 1967, con derrota y las ganas de revancha para la próxima edición.

Ferrero se lamenta en un momento del partido.REUTERS
Philippoussis muestra su alegría tras ganar un punto en el partido contra Ferrero.AP

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