Cometeremos un error si recomendamos un libro, uno solo, para jóvenes. Los trataremos como un magma unitario, sin individualidad, y elegiremos un futuro para ellos. Mientras, los adultos nos manifestamos orgullosos de sentirnos diferentes y de aceptar que hay a quien le gusta Tolstoi y quien prefiere la saga Montalbano.

No recomendaré ningún libro para niños y jóvenes quizá porque no quiero que sean como yo. Dejaré que se les aparezca por azar, que lo descubran por azar y que no produzca ningún efecto o cambie sus vidas. Así de triste, así de cruel, así de mágico.

Envía tu carta ...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Cometeremos un error si recomendamos un libro, uno solo, para jóvenes. Los trataremos como un magma unitario, sin individualidad, y elegiremos un futuro para ellos. Mientras, los adultos nos manifestamos orgullosos de sentirnos diferentes y de aceptar que hay a quien le gusta Tolstoi y quien prefiere la saga Montalbano.

No recomendaré ningún libro para niños y jóvenes quizá porque no quiero que sean como yo. Dejaré que se les aparezca por azar, que lo descubran por azar y que no produzca ningún efecto o cambie sus vidas. Así de triste, así de cruel, así de mágico.

Envía tu carta a BabeliaCartas@elpais.es

Archivado En