El placer de la costumbre
EL PAÍS recupera en su nueva página de juegos los crucigramas de Mambrino, fallecido en 2019
“Historiador romano …muy callado”. Tácito. “Lenin en la actualidad”. Momia. “La cordura es eso”. Seso. “Remate de Dembelé”. E…
Mucho antes de que un programa llamado Pasapalabra lograse el minuto de oro (el más visto) en la televisión, los periódicos ofrecían un juego similar a los lectores, retándoles a adivinar los pensamientos de un hombre al que no habían visto nunca. EL PAÍS tuvo a uno de los mejores, Mambrino, que desafió a diario a una comunidad fiel con sus juegos de palabras, metonimias, metáforas, sinestesias... Cuanto más le conocíamos, cuanto más sabíamos de sus aficiones y gustos (la literatura, el Real Madrid…) más fácil resultaba averiguar dónde quería llevarnos, en vertical y en horizontal. Completar el crucigrama era una de esas pequeñas alegrías cotidianas tan necesarias. No en todas las competiciones dependemos solo de nosotros mismos. No en todos los juegos aprendemos algo nuevo. Con él, siempre.
José Luis Herencia, Mambrino, nos dejó en mayo de 2019, a los 68 años, antes de que la pandemia pusiera nuestras vidas patas arriba; antes de que Florentino Pérez se estrellase con su proyecto de súper liga y de que el rey emérito tuviera que abandonar España para no seguir perjudicando a su hijo con sus escándalos. Seguro que alguno de estos asuntos habría acabado en sus ocurrentes definiciones, para las que huía de las meras descripciones y en las que introducía siempre humor e inteligencia, valga la redundancia.
Sé que muchos lectores de EL PAÍS se alegrarán de que el diario recupere ahora sus crucigramas porque estarán siempre asociados al bienestar que produce la costumbre, a aquellos inconscientes veranos de la vieja normalidad. Me los imagino rellenándolos en la playa, relajados y felices de poder apartar un momento las preocupaciones, los deberes y obligaciones para concentrarse solo en una cosa, entretenerse y aprender. De eso iban los Mambrinos. Bienvenido de nuevo, compañero.