Rectificación de Jaume Roures Llop y Mediaproducción
A la vista de las afirmaciones contenidas en el artículo publicado en EL PAÍS en fecha 8 de marzo de 2018, titulado Hacienda estrecha el cerco a TV3 en sus pesquisas por la consulta, firmado por Oriol Güell, Mediaproduccion y Jaume Roures Llop deben manifestar:
Es falso que el Ministerio de Hacienda haya solicitado información sobre ocho filiales del Grupo Mediapro. El hecho de que el nombre de una empresa contenga la palabra Mediapro no la convierte obligatoriamente en parte del G...
A la vista de las afirmaciones contenidas en el artículo publicado en EL PAÍS en fecha 8 de marzo de 2018, titulado Hacienda estrecha el cerco a TV3 en sus pesquisas por la consulta, firmado por Oriol Güell, Mediaproduccion y Jaume Roures Llop deben manifestar:
Es falso que el Ministerio de Hacienda haya solicitado información sobre ocho filiales del Grupo Mediapro. El hecho de que el nombre de una empresa contenga la palabra Mediapro no la convierte obligatoriamente en parte del Grupo al que represento.
Efectivamente, Mediapro organizó un centro internacional de prensa para dar cobertura a los medios desplazados a Barcelona con motivo del 1 de octubre. El centro, abierto 20 horas al día, ofrecía, por 10 euros al día, a medios y periodistas:
1. conectividad wifi a muy alta velocidad
2. puestos de trabajo totalmente equipados con conexión eléctrica, internet y toma de sonido
3. instalaciones habilitadas para tv
4. servicio de traducción simultánea al castellano, inglés y francés para las 16 comparecencias realizadas
5. servicio de catering permanente, con desayuno, comida y cena
6. zonas de trabajo y salas de edición para tv
7. asistencia técnica e informática permanente
Es totalmente falso que las protestas de los periodistas obligaran a reconsiderar el cobro de 10 euros por periodista y día. Mediapro siguió cobrando los 10 euros durante los 4 días que el IPBC estuvo abierto. Los periodistas que expresaron su negativa a abonar esta cantidad, pudieron acceder a las ruedas de prensa programadas, pero no a los servicios complementarios.