Temporada Alta concentra 10 obras en la Semana de Programadores

El ciclo aglutina la mayor oferta de teatro contemporáneo del festival, que en su ecuador ha logrado ya 53.556 espectadores

Pep Ramis, en un ensayo de su solo.JORDI BOVER

Con la Semana de Programadores, verdadero festival dentro del festival, llega Temporada Alta a su ecuador en la actual edición. El ciclo, bautizado Sacseja't a Temporada Alta, aglutina buena parte de la mejor oferta de teatro contemporáneo y nuevos lenguajes del festival, y convoca a público en general y a programadores.

Pueden verse del jueves al domingo espectáculos tan interesantes como el del italiano Romeo Castellucci Ethica. Natura e origine della mente (una particular versión de los cinco libros de la Ética de Spinoza), el de la brasileña Christiane Jat...

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Con la Semana de Programadores, verdadero festival dentro del festival, llega Temporada Alta a su ecuador en la actual edición. El ciclo, bautizado Sacseja't a Temporada Alta, aglutina buena parte de la mejor oferta de teatro contemporáneo y nuevos lenguajes del festival, y convoca a público en general y a programadores.

Pueden verse del jueves al domingo espectáculos tan interesantes como el del italiano Romeo Castellucci Ethica. Natura e origine della mente (una particular versión de los cinco libros de la Ética de Spinoza), el de la brasileña Christiane Jatahy A floresta que anda (relectura de Macbeth en clave de performance) o The Mountain, the Truth and the Paradise, un solo de Pep Ramis, de la Compañía Mal Pelo, que es estreno en España.

Es el séptimo año que se celebra la Semana de Programadores, que ofrece a éstos la posibilidad no solo de ver espectáculos de creación contemporánea sino de ponerse en contacto directo con los artistas y compañías autores de los mismos.

La cita congrega este año a 70 programadores de 13 países diferentes. En los últimos años han pasado por Girona cerca de 500 profesionales internacionales incluidos representantes de festivales, teatros o instituciones como el Festival de Aviñón, el Théâtre Ôdeon de París, el Festival de Nápoles, el Kusten Festival des Arts de Bruselas o el Théâtre de la Ville de París.

Tres de los espectáculos del ciclo son coproducciones del festival a partir de alianzas con instituciones de dentro y fuera de Cataluña: el de Pep Ramis y Mal Pelo, No se registran conversaciones de interés, de Roger Bernat (presentado en el pasado Grec) y IUanMi, de Lali Ayguadé, una mezcla de danza, música y teatro que se estrena en el festival y en el que participan el Sismògraf de Olot, Numart y la fabrica de creación Graner, entre otros.

A destacar también en la Semana de Programadores el estreno en España de Guerrilla, la última propuesta de El Conde de Torrefiel (incursión de la compañía catalana de gran proyección internacional en el mundo del teatro documental que incluye taichi y música lectrónica). Asimismo figuran en la programación Fang, de Animal Religion y Quim Girón, que muestra la transformación de un cuerpo con barro, o All in, de Atresbandes, una obra que cuestiona la tiranía de la masa.

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También una película: Angélica (una tragedia) en la que el director manuel Fernández-Valdés retrata a la célebre creadora Angélica Lidell, una habitual de Temporada Alta.

A mitad del festival, según el balance de la organización, TemporadaAlta ha vendido 40.072 entradas de las 107 funciones realizadas, y ha congregado a un total de 53.556 espectadores con una ocupación del 74,82 %.

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