Los dueños de limusinas buscan fórmulas legales para su sector

El Ejecutivo regional, pendiente de la propuesta de los propietarios

La Comunidad de Madrid está estudiando fórmulas para regularizar el sector de las limusinas que operan en la región. Según denunció una asociación, el 80% de los vehículos circula de manera ilegal sin tener los correspondientes permisos y licencias necesarios, como la tarjeta de vehículo de transporte colectivo (VTC) o el seguro de responsabilidad civil.

El director general de Transportes del Ejecutivo regional, Pablo Rodríguez, recuerda que han iniciado una campaña conjunta con la Policía Municipal de Madrid que ha terminado con nueve vehículos inmovilizados. A sus dueños se les ha imputado una multa de 4.000 euros, que al ser abonada con antelación, les ha permitido un descuento del 30%. Al final pagaron 2.800 euros.

De las 16 limusinas inspeccionadas el primer día, cinco no presentaban la tarjeta VTC. Al día siguiente se revisaron otras...

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El director general de Transportes del Ejecutivo regional, Pablo Rodríguez, recuerda que han iniciado una campaña conjunta con la Policía Municipal de Madrid que ha terminado con nueve vehículos inmovilizados. A sus dueños se les ha imputado una multa de 4.000 euros, que al ser abonada con antelación, les ha permitido un descuento del 30%. Al final pagaron 2.800 euros.

De las 16 limusinas inspeccionadas el primer día, cinco no presentaban la tarjeta VTC. Al día siguiente se revisaron otras 12, de las que cuatro incumplían la legalidad. Los dueños de los vehículos pagaron las multas ese mismo día o a los dos días, por lo que pudieron volver a circular en un corto periodo de tiempo. “Los propietarios nos insistían en que realizaban una actividad de ocio, pero realmente están haciendo un transporte de viajeros en un vehículo público, por lo que tienen que cumplir con la legalidad vigente. Si no tienen la VTC, están de manera ilegal”, recuerda Rodríguez.

Transportes ha aceptado la solución que proponen algunos empresarios, como es el alquiler de los vehículos sin conductor. Otra empresa es la encargada de suministrar el chófer. Este, una vez que desapareció el carné BTP —dedicado a los vehículos especiales—, no necesitan ninguna autorización ni cursos especiales.

Con este quiebro legal, se permite eludir que las limusinas tengan la tarjeta VTC. “Es una salida para poder mantener ese servicio, pero lo que estamos buscando es que estos vehículos realicen su actividad en igualdad de condiciones que el resto de vehículos”, destacó el director general.

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