La Comunidad abandona el proyecto de un cable esquí en Polvoranca

La oposición vecinal y el desencanto de los Ayuntamientos han motivado que la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio haya dado carpetazo a su proyecto de montar un cable esquí en la laguna de Mari Pascuala, en el parque de Polvoranca, en el término municipal de Leganés. Así lo han comentado fuentes del departamento que dirige Borja Sarasola.

El proyecto fue presentado por la Comunidad a finales del año pasado. Se trata de un innovador sistema que funciona mediante unos remontes mecánicos similares a un telesilla. El deportista se engancha en ese enorme cable y puede pr...

La oposición vecinal y el desencanto de los Ayuntamientos han motivado que la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio haya dado carpetazo a su proyecto de montar un cable esquí en la laguna de Mari Pascuala, en el parque de Polvoranca, en el término municipal de Leganés. Así lo han comentado fuentes del departamento que dirige Borja Sarasola.

El proyecto fue presentado por la Comunidad a finales del año pasado. Se trata de un innovador sistema que funciona mediante unos remontes mecánicos similares a un telesilla. El deportista se engancha en ese enorme cable y puede practicar el esquí acuático como si estuviera tirado por una lancha dentro del lago. El objetivo es que también contara con rampas y desniveles que hicieran más atractivas la actividad para los aficionados. Según fuentes de Medio Ambiente, son numerosos los madrileños que practican este tipo de deporte y que se ven obligados a acudir al cable esquí más cercano, que se encuentra en Los Ángeles de San Rafael, en la provincia de Segovia. Similares existen en Benidorm (Alicante) y Barcelona.

Desde el primer momento, el proyecto del Gobierno regional contó con una clara oposición en la zona sur, en especial en los municipios más cercanos al parque. Una veintena de partidos, sindicatos y asociaciones, y cientos de vecinos, se unieron en contra de su construcción. Montaron una plataforma al entender que el proyecto tendría como consecuencia la destrucción total de la fauna y la flora de la zona. Su actividad llegó incluso a hacer una manifestación en torno a la laguna de Mari Pascuala. Intentaron rodearla con gente cogida por las manos pero no lo lograron.

Fuentes de la Consejería han destacado que la postura de la Comunidad estaba condicionada a que el proyecto no afectara al medio ambiente, en especial a la laguna de Mari Pascuala, y que los cuatro Ayuntamientos implicados (Leganés, Alcorcón, Fuenlabrada y Móstoles), que tienen parte de su territorio en este parque, estuvieran de acuerdo.

De hecho, algunos de esos Ayuntamientos no se mostraron de acuerdo, ya que no les parecía una buena idea. Como ha faltado ese consenso, el proyecto de cable esquí finalmente ha quedado descartado.