Tres detenidos acusados de 20 estafas como falsos revisores del gas
Los imputados obligaban a pagar 100 euros a los vecinos bajo la amenaza de cortarles el suministro o imponerles fuertes multas
Al menos 20 estafas. Eso es lo que imputa la Guardia Civil a tres hombres de nacionalidad española con edades entre 35 y 45 años, acusados de hacer falsas revisiones de gas en los municipios de Boadilla del Monte y en Alcorcón, además de en la capital. Los imputados acudían a domicilios particulares y obligaban a pagar 100 euros a las víctimas bajo la amenaza de que, si no hacían el control de las instalaciones, les cortarían el suministro o les impondrían fuertes multas, según ha informado la Comandancia de Madrid del instituto armado.
Las pesquisas se iniciaron el pasado mes de febre...
Al menos 20 estafas. Eso es lo que imputa la Guardia Civil a tres hombres de nacionalidad española con edades entre 35 y 45 años, acusados de hacer falsas revisiones de gas en los municipios de Boadilla del Monte y en Alcorcón, además de en la capital. Los imputados acudían a domicilios particulares y obligaban a pagar 100 euros a las víctimas bajo la amenaza de que, si no hacían el control de las instalaciones, les cortarían el suministro o les impondrían fuertes multas, según ha informado la Comandancia de Madrid del instituto armado.
Las pesquisas se iniciaron el pasado mes de febrero cuando el cuartel de Boadilla del Monte recibió cinco denuncias en las que tantas personas afirmaban ser víctimas de una compañía dedicada a gas y energía. El Área de Investigación del puesto descubrió que había un grupo formado por tres varones de origen español cuya forma de actuar era siempre la misma.
Acudían a los domicilios particulares y se identificaban como empleados de una empresa dedicada a gas y energías. Con el pretexto de realizar una instalación o una revisión obligatoria, decían a sus víctimas que tenían que pagarles 100 euros. En caso de no hacerlo, procederían contra ellos. Ello suponía una elevada multa e incluso con el corte del suministro de gas.
La mayoría de los particulares accedían a que les realizaran la revisión o la instalación ante tal tipo de amenazas. Tenían que pagarlo, eso sí, en el acto. En caso de no tener el dinero en efectivo, no pasaba nada. La organización estaba tan bien montada que llevaban un datáfono para que sus víctimas pudieran hacer el pago con tarjeta de crédito o de débito.
Los agentes de Boadilla han esclarecido hasta el momento un total de 20 faltas de estafas en domicilios, lo que les convierte dada la suma (2.000 euros, como mínimo) en un delito de estafa continuado. La mayoría de las víctimas eran personas de avanzada edad residentes en Boadilla del Monte, Madrid y Alcorcón.
Fruto de las gestiones realizadas se ha podido constatar que la empresa bajo la que trabajaban no se encontraba dada de alta en ningún Registro Mercantil Central y que cuenta además con un total de 15 reclamaciones por hechos similares.
Los detenidos, con edades entre 35 y 45 años, residen en Madrid y tienen antecedentes policiales por hechos similares y por delitos contra el patrimonio (robos y estafas). También se les imputan un delito de falsificación de documento público y dos faltas de coacciones.