“Hablar de política de austeridad y recortes es cosa del pasado”

Es consciente de ser un gran desconocido entre el electorado gallego y dice estar preocupado por la abstención que se prevé alta el próximo domingo. Pero Francisco Millán Mon (Pontevedra, 1955) confía en que su mensaje electoral, que no se aparta ni un ápice de la consigna oficial de su partido dando por hecho el fin de la crisis y del paro masivo, acabe por movilizar a los votantes.

Pregunta. Se dedicaba hasta ahora en Estrasburgo a asuntos exteriores, no de Galicia.

Respuesta. No, yo me dedico a la comisión de asuntos exteriores y a temas galle...

Es consciente de ser un gran desconocido entre el electorado gallego y dice estar preocupado por la abstención que se prevé alta el próximo domingo. Pero Francisco Millán Mon (Pontevedra, 1955) confía en que su mensaje electoral, que no se aparta ni un ápice de la consigna oficial de su partido dando por hecho el fin de la crisis y del paro masivo, acabe por movilizar a los votantes.

Pregunta. Se dedicaba hasta ahora en Estrasburgo a asuntos exteriores, no de Galicia.

Respuesta. No, yo me dedico a la comisión de asuntos exteriores y a temas gallegos. Tengo la fortuna de pertenecer a un grupo político muy amplio. Somos 23 pendientes de España y de Galicia. No existe contradicción, divergencia, ni incompatibilidad entre los intereses de Galicia y los del resto de España. Son básicamente los mismos. Claro que llevé temas gallegos. Lo primero que hice al llegar al Parlamento Europeo, en julio de 2009, es pedir fondos para el Xacobeo 2010. Al final, de forma trabajosa, hubo 1,8 millones de la UE. El Gobierno de Zapatero no dio ni un duro.

P. ¿Tuvo que ponerse al día de los temas gallegos para esta campaña electoral?

R. Yo he seguido de forma horizontal todos los temas que afectan a Galicia. Me los sé todos, aunque también tenga que ponerme al día porque la realidad es cambiante. No soy un eurodiputado nuevo, llevo 10 años allí y soy de la cuota gallega del grupo mayoritario. Cuando me levanto por la mañana, además de la comisión de asuntos exteriores, tengo muy presente Galicia y sus intereses.

P. ¿Le molesta la etiqueta de cuñadísimo de Rajoy?

R. No, perdóneme, ¿Cómo me iba a molestar? Sí, soy cuñado de Rajoy, quien es además presidente del Gobierno y una persona por la que tengo la mayor estima. Lo que pasa es que además de cuñado de Rajoy, soy otras cosas. A veces se omite.

P. El desconocimiento sobre la labor de los eurodiputados agranda el desinterés por estas elecciones.

R. Todos tenemos que hacer un esfuerzo. Nosotros tenemos que hacer mucha pedagogía, procurar acercarnos a la gente, pero ustedes, los medios de comunicación, también deberíais implicaros más y procurar acercarnos a la gente.

P. ¿Qué consecuencia practica tiene votar al Parlamento Europeo?

R. Muchas. Europa está en un momento crucial de su historia, sobre todo en su línea económica. Estamos saliendo de la crisis y ya en la senda de la creación de empleo tanto a nivel nacional como regional.

P. Pero no es lo que percibe la gente, ni lo atestiguan las cifras.

R. Yo hablo de datos objetivos, y para eso está la campaña, para que la gente lo perciba. Tiene que saber que votando decide muchas cosas porque somos un partido comprometido con Europa y con España. El Parlamento Europeo tiene muchas competencias, desgraciadamente no lo transmitimos bien, y por eso pido ayuda a los medios de comunicación.

P. Las becas Erasmus hicieron mucho por fomentar Europa. ¿Defiende que no haya recorte alguno de ese programa?

R. Sí, hicieron muchísimo. Ahora se creó el Erasmus Plus, hay un incremento importante. Erasmus es una experiencia importante porque empalmas Europa. Y fomenta los idiomas. Yo celebro mucho lo que ha montado aquí el conselleiro Jesús Vázquez con los centros plurilingües. El inglés es imprescindible para nuestra juventud.

P. ¿Considera que el gallego también es importante para el plurilingüismo?

R. Desde el punto de vista europeo, lo que importa es el inglés para moverse, trabajar en otro sitio. El gallego es muy importante si vives en esta tierra.

P. Está ausente del discurso electoral de PP y PSOE uno de los temas que más preocupa a la sociedad, como es la corrupción. ¿No cree que abunda en el desprestigio de la clase política?

R. Creo que más que hablar, debemos actuar. Y se está haciendo, hay un código ético en esta comunidad. Es un tema que preocupa y al que se está haciendo frente. También están los jueces para intervenir. No creo que sea un tema olvidado o desaparecido. Está ahí como en otros países de Europa, no crea usted que sea monopolio de la nación española. No estamos en un índice de corrupción tan alto, en otros países es mucho más exagerado. La corrupción del mal uso de los fondos europeos no es un tema exclusivo de esta tierra.

P. ¿Hay que parar esa política de austeridad y recortes que impone Bruselas?

R. Ese lenguaje suyo es un poquito del pasado, no estamos ya en esa política de austeridad y recortes. No. Hay más que eso. España, con Rajoy, hizo serias reformas, se ganó la confianza europea y al final el señor Barroso le dio tres años más para ajustar el déficit. Es necesario hacer ajustes fiscales pero también el crecimiento, y en eso estamos. No es sólo austeridad.

P. ¿Comparte la opinión de Feijóo de que es justo que la gente esté decepcionada con la política del Gobierno del PP?

R. Hemos pasado por un periodo difícil, con sacrificios del pueblo español. Entiendo que puede estar molesto, decepcionado, disgustado o irritado. Ahora también hay que explicar que nosotros lo hemos hecho porque no quedaba otro remedio. El rescate parecía inevitable. ¿Qué iba a hacer el señor Rajoy? Tomar medidas, poner en marcha reformas estructurales pendientes desde hacía lustros como la del mercado laboral. Pero al mismo tiempo, y comprendo que los ciudadanos no siempre lo capten, Rajoy, como Núñez Feijóo aquí, quiso mantener los pilares del Estado de Derecho. No fue Rajoy quien recortó el sueldo de los funcionarios. Tenemos que explicar a la gente que hicimos cosas que eran inevitables para no tener un rescate absoluto y ser intervenidos como los griegos o los portugueses.

P. Pero hubo rescate bancario que tiene un coste alto.

R. No, tampoco, ningún rescate. Hubo una línea de crédito de 100.000 millones de euros, de los que España sólo necesitó 41.000. Nada tiene que ver con lo que pasó en otros países. En España no gobernó la troika, seguimos siendo soberanos, nadie nos impuso los recortes de las pensiones o de los sueldos de los funcionarios, ni subir el IVA turístico al 23% como en Portugal.