La lucidez del agua, según Pablo Noguera

El artista presenta una exposición con 40 acuarelas y siete óleos en el Palau de la Música

Una de las obras de Noguera.

La lucidez del agua es el título de la nueva exposición del artista valenciano Pablo Noguera. Consta  de 40 acuarelas sobre papel artesanal de algodón y siete óleos sobre lino. La muestra permite apreciar la evolución de un creador siempre interesado en explorar los caminos en los que confluyen la pintura y la materia. La exposición se inaugura este martes en la sala de exposición del Palau de la Música de Valencia (a las 20 horas).

Comisariada por Vicente Colom, el propio artista explica su temprana relación con la acuarela: "Muy pronto comprendí, pincel en mano, que el agua y...

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La lucidez del agua es el título de la nueva exposición del artista valenciano Pablo Noguera. Consta  de 40 acuarelas sobre papel artesanal de algodón y siete óleos sobre lino. La muestra permite apreciar la evolución de un creador siempre interesado en explorar los caminos en los que confluyen la pintura y la materia. La exposición se inaugura este martes en la sala de exposición del Palau de la Música de Valencia (a las 20 horas).

Comisariada por Vicente Colom, el propio artista explica su temprana relación con la acuarela: "Muy pronto comprendí, pincel en mano, que el agua y el papel son la esencia de la acuarela. Luego ya me interesé por el pigmento, por la luz o por cómo intentar domar el agua. La acuarela es rápida como el agua, y como ésta, se evapora. Por ello, te obliga a aprender a no atacar los obstáculos con furia, sino a contornearlos. El agua es impaciente y cabuda". Y añade para explicar el título de su exposición: "Es un camino de lucidez".

Noguera (Valencia, 1974) se ha inspirado también tanto en el Mediterráneo, como en las aguas norteñas de Francia, de donde procede su madre, que forman paisajes de "grises profundos, posados, juiciosos, sosegados y peligrosos", apunta el artista que los conoció bien joven.

Además, hay otras connotaciones en las pinturas, como sostiene Ricardo Forriols en el catálogo de la muestra, historiador del arte: “Será la luz que contienen los papeles de Pablo, la que se vislumbra como por las rendijas de la reserva, la de las transparencias o ciertos destellos de color que fijan la atención; será quizás la apariencia final como de cartografía, la disposición vegetal de las formas o el recuerdo del mismo trazado de las pieles, su geometría orgánica… Será esa cuadrícula central en las composiciones que parece flotar sobre el papel aunque derramándose hacia abajo, la pintura —siendo agua— atraída al final por la gravedad física.

La muestra también los lienzos de gran tamaño que el creador expuso en el palacio de las Naciones Unidas de Ginebra el pasado año, y el enorme Pont de mestissatge, de 2009, que se vio en el Museu Valencià de la Festa de Algemesí. Noguera pretende también que la muestra sea una forma de homenaje al artesano del molino que le suministraba el papel de algodón hecho a mano para sus acuarelas, y para los trabajos de otros artistas como Barceló. El artista valenciano ha protagonizado numerosas exposiciones individuales y colectivas.

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