El arte más irreverente

La feria Art Jaén ocupa la calle y no escapa a la polémica con la censura de una obra

Retirada de una bandera negra de Mario Gutiérrez Cru en Jaén.

Con Bandeiras pretas (banderas negras), el artista madrileño Mario Gutiérrez Cru intentaba remover las conciencias sobre el vacío de nacionalidad en un mundo universal, sin patrias ni fronteras. Así fue como el pasado jueves izó una bandera negra en el lugar que ocupaba la enseña nacional en la plaza Jaén por la Paz. Era, sin duda, una de las intervenciones más arriesgadas e irreverentes de la feria de arte contemporáneo Art Jaén que se celebra hasta el domingo en la capital jiennense.

Pero la bandera desapareció esa misma noche. Los bomberos la retiraron por orden de las autor...

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Con Bandeiras pretas (banderas negras), el artista madrileño Mario Gutiérrez Cru intentaba remover las conciencias sobre el vacío de nacionalidad en un mundo universal, sin patrias ni fronteras. Así fue como el pasado jueves izó una bandera negra en el lugar que ocupaba la enseña nacional en la plaza Jaén por la Paz. Era, sin duda, una de las intervenciones más arriesgadas e irreverentes de la feria de arte contemporáneo Art Jaén que se celebra hasta el domingo en la capital jiennense.

Pero la bandera desapareció esa misma noche. Los bomberos la retiraron por orden de las autoridades locales. “Yo hice una obra que pretendía ser una censura al poder, que a su vez ha sido censurada”, se lamenta Gutiérrez, que ya había desarrollado acciones similares, bajo el concepto del llamado breaking news, en otras ciudades como Milán, Berlín, Lisboa, París o Madrid. Allí no hubo censura.

Polémica aparte, la quinta edición de Art Jaén, organizada por Ferias Jaén y la galería Unodeuno, ha logrado el impacto pretendido gracias de nuevo a su celebración en el Museo Provincial y, sobre todo, a que el arte ha ocupado diferentes espacios públicos de la capital jiennense. Son los casos, por ejemplo, de la instalación Silencio, de Mary Peck, que utiliza un árbol próximo al museo como metáfora del sufrimiento de la naturaleza y reflexión sobre el daño que el ser humano causa a la Tierra. O Kahalo, de la artista Leticia A. Vázquez, una pintura expandida sobre la estatua de la plaza de la Concordia de Jaén para reivindicar lo gestual y la sorpresa al encontrar imágenes donde habitualmente no las hay.

Un total de 11 galerías de todo el país y medio centenar de creadores se dan cita en Art Jaén, cuyos contenidos huyen de una feria artística al uso y proponen una temática más conceptual. Hay pintura, pero también escultura, fotografía o videocreación. Y también se celebra el festival internacional de performance, una expresión artística en auge que llega a Jaén de la mano de artistas internacionales.

“Lo que queremos es llevar el arte a la calle y hacer partícipe a la gente con la interacción en espacios públicos”, explica David Martínez, uno de los promotores de Art Jaén. En la feria se dan cita artistas de la Facultad de Bellas Artes de Granada o las galerías Joan Planellas (Gerona), Culturahaza (Córdoba), Unodeuno (Jaén), Clandestino (San Juan del Puerto), Sala de Blas (Archidona), Scarpia (El Carpio), la Tea (Plasencia), Meca (Almería) y Proyector, Lucía Loren y Kreae (Madrid).

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