El primer premio del Niño deja más de 39 millones de euros en Alicante

Buena parte de los décimos han sido vendidos a la comisión de la 'foguera' Benalúa

La titular de la administración de Alicante y un agraciado celebran el primer premio del Niño.PEPE OLIVARES

El primer premio del sorteo de la lotería del Niño, que ha recaído en el número 30.875, ha dejado 39 millones de euros en la ciudad de Alicante a través de la administración número 6, ubicada en la céntrica plaza de Gabriel Miró.

Este establecimiento ha venido 19,5 series (195 décimos) del primer premio, según ha explicado a los periodistas el hijo de la titular de la administración, César Mateos. A excepción de unos "cuantos décimos, que no llegan a diez", el resto ha sido vendido a la comisión de fiestas de la ...

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El primer premio del sorteo de la lotería del Niño, que ha recaído en el número 30.875, ha dejado 39 millones de euros en la ciudad de Alicante a través de la administración número 6, ubicada en la céntrica plaza de Gabriel Miró.

Este establecimiento ha venido 19,5 series (195 décimos) del primer premio, según ha explicado a los periodistas el hijo de la titular de la administración, César Mateos. A excepción de unos "cuantos décimos, que no llegan a diez", el resto ha sido vendido a la comisión de fiestas de la foguera Benalúa.

La administración, bautizada como El Negrito, también ha vendido "series completas" de los números terminados en toda la decena del número premiado, "por lo que son muchos millones más los repartidos".

Hasta el momento han sido pocos los afortunados que se han acercado hasta la oficina de lotería, pero los miembros de la hoguera Benalúa están celebrándolo por todo lo alto, ha señalado Mateos, quien ha indicado también que tuvo que devolver 16 series y media de este número.

El lotero ha mostrado su satisfacción por haber repartido un primer premio de Navidad por primera vez en su vida, dado que hasta la fecha tan solo había vendido terceros, cuartos o quintos premios. "Lo bonito es vender sueños; la gente cree que este tipo de premios están muy lejos, pero en realidad están en la misma esquina", ha subrayado.

Preguntado sobre si él se había quedado con algún décimo premiado, ha señalado que viene de familia de loteros y que su padre siempre le decía que su función "es darlo (el premio), no quedárselo".

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Mientras, en el barrio de Benalúa, los vecinos descorchaban botellas de cava entre lágrimas de alegría. Los décimos y las participaciones se han sido vendidos en numerosos establecimientos comerciales, bares y pequeñas tiendas.

De hecho, algunas participaciones son solo de uno o 2,5 euros, como han asegurado los vecinos agraciados, muchos de los cuales han salido a la calle para compartir la emoción.

En la sede de la hoguera Benalúa se han concentrado números ciudadanos del barrio, algunos mostrando el décimo y la participación premiada. Las comisiones de Fogueres venden décimos y participaciones de lotería desde hace años, ya que buena parte de los presupuestos de los monumentos de cartón y madera que cada mes de junio se plantan en Alicante salen de este dinero.

"La suerte, Dios o lo que sea me ha traído dinero, y lo necesitaba como agua de mayo", ha afirmado María del Carmen entre lágrimas de emoción, las mismas que sobre su rostro ofrecía Julia, una mujer de 54 años a la que el paro había dejado, según ha afirmado, en una "delicada situación".

Un décimo en Banyeres de Mariola

También en la provincia de Alicante, el segundo premio del sorteo, que ha recaído en el 46.674 y está dotado con un millón de euros a la serie, ha dejado un pellizco de 100.000 euros en Banyeres de Mariola. La administración número 2 despachó por terminal un único décimo de este segundo premio.

Dos vecinas de este municipio lo adquirieron a última hora de ayer después de que en una cena de Nochevieja un hombre les dijera que el premio del Niño terminaría en 74, ha explicado a EFE una de ellas, Encarnación.

"Cuando vea a este hombre me lo como a besos, me da igual su mujer y mi marido", ha dicho entre risas esta mujer, quien junto a unos familiares y amigos ha celebrado "este maravilloso dinero" en un bar de su localidad, un pueblo del interior de la provincia de Alicante de 7.000 habitantes.

Casada y con cinco, Encarnación, que comparte este décimo con una amiga, ha explicado que, a raíz de lo que les dijo este hombre, decidieron comprar un número terminado en 74. "Los tres números anteriores a esta terminación han sido al azar", ha añadido Encarnación.

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