Detenido un grupo de aluniceros acusados de cometer robos en la región
El grupo se había especializado en asaltar perfumerías, ópticas y tiendas de telefonía móvil
La denominada Operación Racas ha permitido desarticular a un grupo de aluniceros-maceros que actuaba en la Comunidad de Madrid y en Castilla La Mancha. Esta banda, formada por cinco personas, se había especializado en asaltar perfumerías, ópticas, tiendas de telefonía móvil y ropa deportiva, según ha informado la Comandancia de la Guardia Civil de Madrid. Se les imputan los delitos de robo con fuerza, tráfico de estupefacientes, pertenencia a grupo criminal y delitos de hurto.
La Guardia Civil inició las investigaciones el pasado mes de julio después de que una óptica de Navalcarnero su...
La denominada Operación Racas ha permitido desarticular a un grupo de aluniceros-maceros que actuaba en la Comunidad de Madrid y en Castilla La Mancha. Esta banda, formada por cinco personas, se había especializado en asaltar perfumerías, ópticas, tiendas de telefonía móvil y ropa deportiva, según ha informado la Comandancia de la Guardia Civil de Madrid. Se les imputan los delitos de robo con fuerza, tráfico de estupefacientes, pertenencia a grupo criminal y delitos de hurto.
La Guardia Civil inició las investigaciones el pasado mes de julio después de que una óptica de Navalcarnero sufría un asalto, en el que fueron sustraídas numerosas gafas de primeras marcas. Los agentes lograron identificar a un grupo delictivo que se apoderaba de objetos de valor mediante el alunizaje (empotrar un vehículo contra un escaparate) o usando mazas para romper los cristales.
Un taller clandestino en Leganés era utilizado como centro de operaciones, en el que desguazaban los vehículos sustraídos. Después vendían las piezas para ocultar cualquier rastro. Para cometer los robos, la banda siempre utilizaba vehículos de gran cilindrada que había sustraído tras manipular las centralitas electrónicas de los coches. En otras ocasiones los arrebatan mientras sus dueños echaban combustible en una gasolinera.
Una de las señas de identidad del grupo es que la red utilizaba papeleras municipales para almacenar los efectos que sustraían y poder así llevárselos más cómodamente. La Guardia Civil ha realizado tres registros domiciliarios en Madrid y Leganés, donde han recuperado gran cantidad de teléfonos móviles, televisiones, gafas, cremas, perfumes, ropa deportiva, relojes, 27 bellotas de hachís y cinco papelinas de cocaína. En el taller de Leganés también hallaron cinco coches sustraídos y las piezas de otros cuatro que estaban prácticamente desguazados.
Los detenidos, en su mayoría residentes del distrito de Villaverde, tienen entre 20 y 30 años. La operación Racas, realizada por el área de investigación el puesto de Navalcarnero, permanece aún abierta y no se descartan más detenciones.