Junqueras insta a Mas a romper los pactos que mantiene con el PP

La transición nacional no se puede hacer yendo del brazo del PP. Ni mediante pactos en el Congreso ni en los ayuntamientos. Este es el mensaje que ayer envió a Convergència i Unió Oriol Junqueras, líder de Esquerra Republicana. El candidato republicano pidió a CiU que rompa sus acuerdos con el PP en los ayuntamientos de Castelldefels y Badalona y en la Diputación, al tiempo que les reprochaba sus pactos para aprobar los Presupuestos de la Generalitat. “Si se quiere avanzar hacia la independencia no se puede tener como aliado a quien niega el futuro del país y mantiene el discurso del miedo”, e...

La transición nacional no se puede hacer yendo del brazo del PP. Ni mediante pactos en el Congreso ni en los ayuntamientos. Este es el mensaje que ayer envió a Convergència i Unió Oriol Junqueras, líder de Esquerra Republicana. El candidato republicano pidió a CiU que rompa sus acuerdos con el PP en los ayuntamientos de Castelldefels y Badalona y en la Diputación, al tiempo que les reprochaba sus pactos para aprobar los Presupuestos de la Generalitat. “Si se quiere avanzar hacia la independencia no se puede tener como aliado a quien niega el futuro del país y mantiene el discurso del miedo”, espetó Junqueras.

El Partido Popular ha sido el compañero de viaje predilecto de CiU durante esta corta legislatura. Pero Esquerra, con Junqueras como líder, no se ha cansado de tender la mano al gobierno catalán buscando realzar las reivindicaciones nacionalistas —como el concierto económico— durante los últimos dos años. Eso sí, ERC ponía como condición acabar con los recortes sociales y recuperar el impuesto de sucesiones para las rentas más altas, a lo que Mas siempre negó. Hasta la manifestación del 11 de septiembre, las aspiraciones nacionalistas de CiU apenas eran visibles y encontró en el PP un aliado ideal para emprender tres oleadas seguidas de ajustes presupuestarios.

ERC busca este 25 de noviembre recuperar peso y dejar atrás la larga travesía del desierto en la que los republicanos han sido relegados a quinta fuerza del Parlament. Con el independentismo en un punto álgido, el PSC naufragando y el PP estancado, Esquerra aspira a convertirse en segunda fuerza, aunque destaque poco por encima de socialistas y populares. Con esta posición de fuerza recuperada, los republicanos se postulan como el partido “más fiable” y garante de que el proceso soberanista no sufrirá retrasos ni trabas.

Y es que Junqueras no se acaba de fiar de CiU. El líder republicano no duda de Artur Mas (al que nunca critica), sino de miembros de CiU como Josep Antoni Duran i Lleida. “Una mayoría absoluta de CiU encallaría y ralentizaría el proceso”, aseguró ayer Junqueras. El candidato receló, aunque sin citarlos, de Unió y Duran Lleida, por su oposición a la independencia. “Nos da miedo que en la primera curva o ante la primera oferta, CiU se salga del camino. CiU tiene en su casa gente que no tiene ningún escrúpulo a la hora de poner palos en la rueda en el camino del presidente” [ARTUR MAS], incidió ayer Junqueras en un mitin en Sant Carles de la Ràpita.

Pero el acuerdo entre CiU y ERC no se ve a priori tan claro. Junqueras asegura que pone dos condiciones para pactar con CiU: no andarse con rodeos en la consecución de la independencia y virar hacia un modelo económico más equitativo.