El fiscal pide 13 años de cárcel para el dueño de la inmobiliaria Contsa

El ministerio público le acusa de estafa y pide para su esposa otros seis años de prisión

El dueño de la inmobiliaria Contsa, José Salas. JULIÁN ROJAS

La Fiscalía de Sevilla ha pedido 13 años de cárcel para el dueño de la inmobiliaria Contsa, José Salas Burzón, por un delito societario, otro de insolvencia punible y un tercero de estafa en concurso ideal con un delito continuado de falsedad en documento mercantil. Contsa, que se encuentra en suspensión de pagos, se declaró en concurso con 1.658 acreedores y un déficit patrimonial de 87 millones.

El fiscal de delitos económicos explica en su escrito de acusación que el acusado estuvo en p...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

La Fiscalía de Sevilla ha pedido 13 años de cárcel para el dueño de la inmobiliaria Contsa, José Salas Burzón, por un delito societario, otro de insolvencia punible y un tercero de estafa en concurso ideal con un delito continuado de falsedad en documento mercantil. Contsa, que se encuentra en suspensión de pagos, se declaró en concurso con 1.658 acreedores y un déficit patrimonial de 87 millones.

El fiscal de delitos económicos explica en su escrito de acusación que el acusado estuvo en prisión casi dos años, después de actuar "movido por el deseo de captar inversores y para aparentar una solvencia de la que carecía frente a terceros, principalmente frente a inversores, acometió un fuerte aumento de capital social, siempre ficticio y que no respondía a la realidad". "Ante la inminente insolvencia de seguir pagando los intereses de los inversores en la sociedad, comenzó a ofrecer a estos la conversión de sus créditos o parte de los mismos en acciones sin voto de la sociedad, logrando convertir en accionistas a 433 acreedores", detalla la fiscalía.

El acusado ofrecía créditos de vencimiento anual retribuidos a tipos entre el 5 y el 45%. "De esta guisa, la sociedad gestionada de forma personal por el acusado continuaba su devenir en una suerte de huida hacia delante, donde los intereses procedentes de anteriores se solventaban con nuevos créditos en inversiones". Así conseguía el empresario que los intereses devengados por la sociedad ascendieran al menos a 20 millones de euros anuales. Esta insolvencia patente de la empresa llegó en 2007 a devenir en un pasivo de 86 millones, y a pesar de ello, el imputado "continuó captando clientes bajo la supuesta existencia de una empresa saneada". Así hasta que dos acreedores solicitaron a un juez de lo Mercantil el concurso de acreedores de la sociedad.

En su escrito de acusación, el fiscal pide para la esposa de Salas, María del Carmen Bautista Delgado, seis años de prisión y una multa de 23.400 euros como cooperadora necesaria de un delito de falsedad y estafa, y otro de insolvencia punible.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Sobre la firma

Archivado En