“Una decisión personal meditada”

Pere Navarro decidió en julio que el inicio del curso político era el momento para dar un puñetazo sobre la mesa del grupo parlamentario. Solo informó de su decisión a Daniel Fernández, secretario de organización, y a Antonio Balmón, secretario de acción política y alcalde de Cornellà de llobregat (Barcelona). Los tres estuvieron de ac...

Pere Navarro decidió en julio que el inicio del curso político era el momento para dar un puñetazo sobre la mesa del grupo parlamentario. Solo informó de su decisión a Daniel Fernández, secretario de organización, y a Antonio Balmón, secretario de acción política y alcalde de Cornellà de llobregat (Barcelona). Los tres estuvieron de acuerdo, pero Navarro no desveló ni el alcance de los cambios ni los nombres que iba a escoger.

Eso lo decidió en agosto, mientras continuaba su interminable peregrinaje para darse a conocer en los pueblos de Cataluña y en algunas federaciones del PSOE que en su día optaron por Carme Chacón frente a Alfredo Pérez Rubalcaba. El pasado fin de semana ya había resuelto el sudoku y lo volvió a comunicar a Fernández y Balmón a la espera de la ejecutiva del lunes.

El nuevo tridente del PSC admite sin reparos que desconocía por completo el funcionamiento del grupo parlamentario catalán cuando llegó a la dirección y que lo mejor era darse un tiempo. No en vano, solo Fernández ocupa escaño desde hace años, mientras que Navarro y Balmón han desarrollado su actividad política en el mundo municipal,

“El calendario parlamentario hacía imposible adelantar los cambios, habiendo de por medio el debate sobre el pacto fiscal y la aprobación de los presupuestos”, dice Balmón a modo de justificación. “Llevábamos tiempo reflexionando sobre esta y otras cuestiones, pero ha sido una decisión personal meditada y compartida de Navarro”, dice.

No todo el mundo lo ve igual en el grupo parlamentario. “Es una mezcla de la necesidad de dar un golpe de autoridad con la de acabar con la gente que te molesta”, dice un diputado, quien va más allá y se pregunta por qué Navarro no ha apostado claramente por poner un equipo suyo en el grupo parlamentario. “Porque no lo tiene”, responde.

Eso parece incuestionable y lo admitió el propio Navarro en una entrevista concedida a EL PAÍS el pasado viernes. “El proceso congresual del PSC no finalizará hasta la renovación de las candidaturas en el Parlament y en el Congreso”, dijo. O sea, que todavía faltan unos meses para que llegue ese día y el próximo puñetazo vendrá con las listas.