Alonso no admite críticas tras la accidentada Nit de l’Albà en Elche

La regidora califica de “bajeza moral” las manifestaciones de la oposición

La alcaldesa de Elche, Mercedes Alonso.JOAQUÍN DE HARO

Todo era adecuado en la Nit de l’Albà y “solo hubo una veintena de heridos leves”. La alcaldesa de Elche, Mercedes Alonso, omitió que la explosión, 10 minutos antes del horario oficial para su disparo (las cero horas) de la Palmera de la Virgen, causó tres heridos graves y que se contabilizaron hasta 103 heridos en la posterior guerra de las carretillas. La regidora aseguró este miércoles, tras la procesión en honor de la Patrona de Elche, la Virgen de la Asunción, que la seguridad ha sido “excepcional” en las...

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Todo era adecuado en la Nit de l’Albà y “solo hubo una veintena de heridos leves”. La alcaldesa de Elche, Mercedes Alonso, omitió que la explosión, 10 minutos antes del horario oficial para su disparo (las cero horas) de la Palmera de la Virgen, causó tres heridos graves y que se contabilizaron hasta 103 heridos en la posterior guerra de las carretillas. La regidora aseguró este miércoles, tras la procesión en honor de la Patrona de Elche, la Virgen de la Asunción, que la seguridad ha sido “excepcional” en las fiestas patronales. Alonso llegó a calificar de “bajeza moral” las declaraciones de algunos políticos de la oposición. “Nadie tiene la culpa” del “lamentable” accidente pirotécnico ocurrido la noche del lunes.

En declaraciones a los periodistas Alonso anunció que el próximo año se estudiará ampliar la seguridad para evitar el lanzamiento de cohetes y pólvora en las inmediaciones de la citada basílica. La regidora también explicó que está en contacto permanente con la familia del pirotécnico Vicente Albarranch, que tiene el 60% de su cuerpo quemado: “Sigue estando más preocupado por la Palmera de la Virgen y de lo sucedido que con sus propias heridas”.

Alonso aseguró que todo el Gobierno municipal de Elche, del PP, está “muy afectado” por lo ocurrido y pendiente del estado de salud de Albarranch. “Nuestro corazón está con Vicente. Por encima de las fiestas y de todo, están las personas”, agregó. La misma la noche del accidente, cuando el pirotécnico ya estaba en el hospital con el 60% del cuerpo quemado, Alonso dijo que no se había registrado ninguna “desgracia”.

La regidora recordó que siempre se han tirado cohetes desde terrazas colindantes con la basílica y nunca había pasado nada. Aun así, apuntó la posibilidad de plantearse que no se lancen cohetes desde las inmediaciones de la torre del campanario y que la policía se situara en las terrazas para “salvaguardar el perímetro”. “Esto ha sido un desgraciado accidente. La pólvora conlleva sus riesgos, lo que no ha pasado en cien años pasa en un segundo”, defendió.

Según la alcaldesa ilicitana, “sólo hubo una veintena de heridos leves”

Alonso también subrayó que, cuando se produjo el percance, no había nadie en el campanario de la basílica de Santa María para contemplar el espectáculo, ya que si hubiera habido personas en ese sitio, como otros años, habría ocurrido “una desgracia”. También defendió a la pirotécnica La Alpujarreña, responsable de los fuegos artificiales de la Nit de l’Albà, que, dijo, es una empresa “contrastada”.

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Esta era también la responsable del lanzamiento de la última mascletà de las fiestas de Elche, el miércoles a mediodía, como ganadores del concurso del año pasado, pero, tras declinar llevarlo a cabo después de lo sucedido la noche del lunes, la encargada fue la pirotecnia Ferrández, de Redován.

Alonso se refirió también a las declaraciones realizadas el martes desde el PSPV-PSOE de Elche, en las que los socialistas pedían “explicaciones claras y contundentes” al Gobierno local por el percance sucedido en la celebración de la Nit de l’Albà.

La regidora calificó de “bajeza moral increíble, sobre todo cuando hay una persona con casi el 60% del cuerpo quemado”. Y tras agradecer las muestras de apoyo del presidente de la Generalitat, Alberto Fabra; de la presidenta de la Diputación, Luisa Pastor, y de “multitud de ciudadanos”, agradeció los ánimos de los exalcaldes socialistas de Elche Diego Macià y Manuel Rodríguez. En ese momento de su intervención se emocionó y no pudo seguir hablando con los periodistas.

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