Siete años de cárcel por facilitar explosivos a Resistencia Galega

La Audiencia Nacional condena a Carlos Calvo por colaboración con organización terrorista

La Audiencia Nacional ha condenado a siete años de prisión por tenencia de explosivos y colaboración con organización terrorista a Carlos Calvo Varela, de 26 años, acusado de facilitar a Resistencia Galega los explosivos para un atentado contra un cajero de NovaCaixaGalicia (NCG) en la Alameda Suárez de Llanos de Vigo en octubre de 2011. La Sección Primera ha absuelto al joven del delito de pertenencia a organización terrorista después de que la fiscalía retirara la acusación dur...

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La Audiencia Nacional ha condenado a siete años de prisión por tenencia de explosivos y colaboración con organización terrorista a Carlos Calvo Varela, de 26 años, acusado de facilitar a Resistencia Galega los explosivos para un atentado contra un cajero de NovaCaixaGalicia (NCG) en la Alameda Suárez de Llanos de Vigo en octubre de 2011. La Sección Primera ha absuelto al joven del delito de pertenencia a organización terrorista después de que la fiscalía retirara la acusación durante el juicio, que se celebró los pasados 8 y 9 de abril.

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La sentencia considera probado que el 10 de octubre de 2011 Calvo Varela proporcionó a la banda un artefacto explosivo elaborado con material pirotécnico, perclorato potásico y azufre y cuyo mecanismo de ignición se componía de una pila y un reloj. Para facilitar el acceso al cajero automático a la persona que finalmente colocó la bomba, Calvo rompió un trozo de su carné de conducir con el que bloqueó el mecanismo de cierre de la puerta. Esa noche, sobre la 1.30, una persona que no ha sido identificada colocó el explosivo dentro del cajero automático dentro de una bolsa sobre la que dejó una nota con el aviso “Perigo bomba [Peligro bomba, en gallego]”.

Unos jóvenes que acudieron al cajero a sacar dinero una hora después descubrieron el artefacto y avisaron a la policía. Los artificieros explosionaron la bomba en la calle a la altura del número 34 de la Alameda Suárez de Llanos de Vigo. La deflagración causó daños por más de 26.000 euros a los vecinos de la zona.

El acusado, que ya fue condenado en diciembre de 2014 por el Tribunal Supremo por colaboración con organización terrorista negó haber entregado el explosivo a Resistencia Galega. Sin embargo, las pruebas practicadas sobre el trozo del carné de conducir con el que se bloqueó la puerta del cajero han demostrado que este documento le pertenecía sin ningún género de dudas.

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