Álvarez-Cascos y Llamazares consiguen un escaño en el Congreso

En Asturias, PP y PSOE empatarán en escaños (3) y sufrirán el mismo desgaste al lograr uno menos de los que obtuvieron en 2004 y 2008, cuando se repartieron a parte iguales los ocho diputados en liza. De ello se beneficiarán el novato partido casquista Foro Asturias Ciudadanos (FAC), que debutará en el Congreso con un diputado -aunque muy lejos de su aspiración de formar grupo ...

En Asturias, PP y PSOE empatarán en escaños (3) y sufrirán el mismo desgaste al lograr uno menos de los que obtuvieron en 2004 y 2008, cuando se repartieron a parte iguales los ocho diputados en liza. De ello se beneficiarán el novato partido casquista Foro Asturias Ciudadanos (FAC), que debutará en el Congreso con un diputado -aunque muy lejos de su aspiración de formar grupo propio-, y la coalición IU, que al repescar a su excoordinador general Gaspar Llamazares como cabeza de lista por Asturias, recuperará el escaño que había tenido hasta hace dos legislaturas.

El PSOE resiste en Asturias mucho mejor que en el resto de España y el PP, aunque no logrará doblegar a los socialistas –lo que volverá a generar frustración en sus filas- sí consigue imponerse a Francisco Álvarez-Cascos, que en los comicios autonómicos de mayo había infligido una severa derrota a los populares y que ahora se quedará muy por debajo. Así que PSOE y PP, aunque bajan en Asturias respecto a 2008, tendrán motivos para felicitarse, pero por motivos distintos. Y lo mismo Izquierda Unida y FAC. IU porque vuelve a tener diputado por Asturias y FAC porque, aun cuando evidencia un claro desgaste respecto a mayo, logra el hito de conseguir plaza en el Congreso diez meses después de su fundación.

La buena noticia para el PSOE es, pues, que mantiene el tipo y no se desploma en Asturias frente al PP. Y la buena nueva para el PP es que, pese a perder –al igual que los socialistas- una plaza en el Congreso, volverá a recuperar la condición de partido conservador de referencia en la región, después de que en las elecciones regionales de mayo se la hubiese arrebatado el ex secretario general del PP Francisco Álvarez-Cascos con su nueva organización (FAC). Entonces, FAC asestó un duro revés a los populares, superando en casi diez puntos al PP y convirtiéndose en la segunda fuerza política en votos en Asturias, a escasa distancia del PSOE, y la primera en escaños (uno más que los socialistas).

Álvarez-Cascos, según el CIS, materializará su aspiración de estar presente en el Congreso pero se quedará muy lejos –como era previsible- del ambicioso objetivo que se había marcado de disponer de grupo parlamentario propio. Lo peor para FAC es que sufre un claro desfondamiento respecto a sus estelares resultados de mayo, cuando debutó en las urnas. Ahora pasa a ser la tercera fuerza política en Asturias, con lo que no parece capitalizar sus casi cuatro meses de gestión al frente del Gobierno del Principado.

La presencia de FAC erosiona parcialmente al PP pero en modo alguno le genera una debacle como sí ocurrió en las autonómicas de este año. Rajoy salva así la cara frente a su excompañero del Consejo de Ministros y el resultado no será inocuo en la vida política asturiana, donde FAC gobierna en franca minoría (solo 16 de los 45 diputados) y sin apoyos.

El retroceso de los socialistas lo capitaliza sobre todo Izquierda Unida, que, al efecto de trasvase de los votos entre las opciones de la izquierda por el desgaste del PSOE, suma el tirón electoral de Gaspar Llamazares, que vuelve a ser candidato por su tierra y repite como diputado general.