La advertencia de la Guardia Civil antes de tirar un paquete con tus datos a la basura
Sirve para protegerse de casos de suplantación de identidad y, en ciudades como Madrid, para evitar multas de 2.000 euros si las cajas están fuera del contenedor
Más de tres millones de visualizaciones acumula en TikTok una advertencia de la Guardia Civil sobre una sencilla regla que los ciudadanos deberían seguir antes de tirar a la basura un paquete recibido a domicilio.
“Una, dos y hasta tres cajas con etiquetas con datos personales”, dice el agente al lado de un contenedor, mientras sostiene en la mano trozos de cajas de cartón. “Si a menudo recibes paquetes como este con información personal, ten en cuenta que puedes ser víctima de una suplantación de identidad”, advierte.
A continuación, el agente muestra “un sencillo truco para no ponérselo tan fácil a los malos”: bastaría con echar gel hidroalcohólico en la etiqueta para borrar los datos. Y, si no, destruir la parte del etiquetado arrancando y destruyendo esa parte.
La suplantación de identidad es un delito que consisten en hacerse pasar por otra persona usando datos personales sin autorización de la víctima. Puede derivar en acciones fraudulentas como la apertura de cuentas bancarias, solicitud de créditos, compras, altas de contratos... También se pueden dar otras situaciones, como lo que le ocurrió a una vecina de Madrid que fue multada con 2.001 euros por una caja de cartón tirada fuera del contenedor.
La mujer pudo ser identificada porque aparecía su nombre en la pegatina de entrega del paquete, correspondiente a una compra online de pañales. Hasta el pasado agosto cerca de 300 habitantes de Madrid habían sido multados por el mismo motivo, según datos a los que tuvo acceso EL PAÍS a partir de una solicitud de transparencia. En este reportaje, el periodista Fernando Peinado recogía casos como el de una vecina que compró en Amazon dos barras de cortina por 46 euros y al final le acabaron costando 2.151 euros: el Ayuntamiento de Madrid desestimó sus recursos y al final acabó pagando la sanción más un recargo de 100 euros. Se trata de una campaña de sanciones contra la suciedad del Ayuntamiento de Madrid. “Fue multada por un inspector municipal que halló las dos cajas de cartón alargadas apoyadas junto al contenedor, con la pegatina que contenía sus datos personales”, explicaba el texto.