Albergues de migrantes luchan bajo amenazas, extorsiones y ataques
Embajada Migrante, uno de los refugios para migrantes en Tijuana, tuvo que cerrar por las agresiones en su contra
Los migrantes atrapados en el limbo entre Estados Unidos y México se han convertido en presa fácil para el crimen organizado, que ha lanzado una ola de ataques, amenazas y extorsiones contra los albergues en la frontera.
El 29 de noviembre, uno de los refugios principales en Tijuana, Embajada Migrante, se vio forzado a cerrar debido a las extorsiones. Por cuatro meses, la administración y migrantes fueron blanco de criminales que les exigían cientos de dólares por permitirles el paso a la frontera. Otro centro de refugio al borde del Río Bravo sufrió recientemente un intento de secuestro.
A las amenazas frecuentes se le suma la saturación que atraviesan estos centros, debido al reciente desalojo de un campamento informal bautizado como ‘la pequeña Venezuela’. Los habitantes de este asentamiento ahora se han dispersado por Ciudad Juárez, aumentando su nivel de riesgo.
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