Sale de la cárcel el capo que ordenó la muerte del periodista Javier Valdez
Dámaso López Serrano cumplía condena en Estados Unidos por un delito de drogas. La viuda del reportero ha pedido que sea extraditado a México
Dámaso López Serrano ha salido de la cárcel de Estados Unidos en la que cumplía condena por delitos relacionados con la distribución de drogas, según la oficina de Prisiones. Es el hijo de Dámaso López Núñez, apodado El licenciado, quien fue mano derecha de otro capo del narco, el Chapo Guzmán, pero el ahora excarcelado es bien conocido en México porque se le atribuye la orden de muerte que acabó con la vida del periodista sinaloense Javier Valdez. Los jueces que han revisado s...
Dámaso López Serrano ha salido de la cárcel de Estados Unidos en la que cumplía condena por delitos relacionados con la distribución de drogas, según la oficina de Prisiones. Es el hijo de Dámaso López Núñez, apodado El licenciado, quien fue mano derecha de otro capo del narco, el Chapo Guzmán, pero el ahora excarcelado es bien conocido en México porque se le atribuye la orden de muerte que acabó con la vida del periodista sinaloense Javier Valdez. Los jueces que han revisado su caso señalaron la buena conducta del preso que, ante el jurado, pidió perdón: “Quiero ofrecer una disculpa a todas aquellas personas a las que perjudiqué tanto con mis acciones. Hice mal y lo reconozco. Me equivoqué al elegir ese camino”. “Voy a ser una persona completamente diferente de lo que solía ser. Les pido una oportunidad para comenzar una nueva vida”.
La viuda del periodista asesinado en 2017 ha pedido a las autoridades mexicanas que gestionen la extradición de López Serrano; Griselda Triana no está de acuerdo con que quede en libertad bajo argumentos de colaboración con la justicia y su supuesto arrepentimiento, ha comunicado en redes sociales. Tanto ella como los compañeros del semanario Ríodoce han reivindicado siempre que sea juzgado por el asesinato del periodista, conscientes de que lo que lo mantenía preso era una cuestión de drogas que nada tenía que ver con el caso.
López Serrano se entregó a las autoridades en Estados Unidos, en lo que algunos entienden como un intento de proteger su vida con la cárcel, acosado como estaba por los carteles contrarios. Él y su padre, antaño amigos del Chapo Guzmán, entablaron después una guerra contra los sucesores de este, los Chapitos y el líder del cartel de Sinaloa, Ismael el Mayo Zambada. El ahora excarcelado colaboró con la justicia en el proceso que se siguió contra la esposa del Chapo, Emma Coronel.
Javier Valdez fue cofundador del semanario sinaloense Ríodoce y algunas informaciones suyas sobre El Licenciado fueron previas a su asesinato a tiros frente a la redacción donde trabajaba, razón por la cual, junto a otras sospechas, se le consideró a su hijo responsable del crimen. El cadáver de Valdez fue un enorme aldabonazo sobre la percepción pública de la violencia en México y sobre la que se ejerce sobre los medios de comunicación. Los colegas no han dejado que su nombre se olvidara y han sido múltiples los homenajes y recuerdos que ha reivindicado justicia completa. Dos de los acusados del tiroteo están encarcelados, pero el que lo ordenó, según algunas pesquisas, permanecía, hasta este viernes, encarcelado en Estados Unidos.
El abogado del convicto, Matt Lombard, subrayó en medios estadounidenses que López Serrano “ha demostrado remordimiento por sus acciones pasadas y capacidad para purgar sus errores”. Lombard se mostró convencido de que el delincuente no volverá a pasar por el tribunal.
En sintonía con estas declaraciones se encuentran las efectuadas por la juez Sabraw, quien considera que el reo hizo “progresos desde su encarcelamiento” y se mostró confiada en sus palabras de arrepentimiento y en su sinceridad. López Serrano, ante la Corte, pidió una segunda oportunidad para rehacer su vida.
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