Almeida dispara el gasto en obras para los presupuestos de 2022

Sucede casi siempre. El día que se cuadran las cuentas municipales de los 8131 ayuntamientos de España, el alcalde o la alcaldesa del municipio presume de tener los mejores presupuestos posibles para sus ciudadanos. Minutos después, o incluso antes, la oposición explica que las cuentas tienen mucho maquillaje, que el reparto de las concejalías está muy mal hecho y que, en definitiva, son los peores presupuestos posibles para los vecinos. Esto, en el mejor de los casos y si el curso político va según lo previsto, ocurre una vez al año en cada pueblo, ciudad e incluso región. La capital de Españ...

Sucede casi siempre. El día que se cuadran las cuentas municipales de los 8131 ayuntamientos de España, el alcalde o la alcaldesa del municipio presume de tener los mejores presupuestos posibles para sus ciudadanos. Minutos después, o incluso antes, la oposición explica que las cuentas tienen mucho maquillaje, que el reparto de las concejalías está muy mal hecho y que, en definitiva, son los peores presupuestos posibles para los vecinos. Esto, en el mejor de los casos y si el curso político va según lo previsto, ocurre una vez al año en cada pueblo, ciudad e incluso región. La capital de España presentó este lunes sus nuevas cuentas, las terceras del alcalde popular José Luis Martínez-Almeida, con unos presupuestos de 5.481 millones de euros, 415 más que este año (5.066) y donde el gasto crecerá un 8% más que en este curso. Minutos después, la oposición (Ahora Madrid, PSOE y Recupera Madrid, que forman el Grupo Mixto) argumentó que estas cuentas no eran buenas para los madrileños. Vox, por el momento, guarda silencio.

El primer paso para aprobar los presupuestos se hizo este lunes tras una junta de Gobierno extraordinaria. La idea inicial de populares y Ciudadanos era haber amarrado el engranaje de los números municipales hace ya unas semanas. Encarrilar el último trimestre del año con las enmiendas de los grupos políticos y negociar, mientras tanto, el sí de los cuatro votos necesarios para que salgan adelante, dado que la suma del pacto del PP, con 15 concejales, y de Ciudadanos, con 11, no alcanza la mayoría absoluta soñada por todos de los 30 ediles. La prioridad, por tanto, y como sucede desde el inicio de la legislatura y como ha recalcado el alcalde en la rueda de prensa de presentación de las cuentas, será sentarse en los próximos días con Vox. Y después, con el resto. “Es obvio y parece razonable”, observó. “Este equipo de Gobierno ha sido leal con Vox. Debe ser Vox el que decida si está dispuesto a aprobar estos presupuestos”. La vicealcaldesa, Begoña Villacís, visiblemente incómoda con el guiño de los populares a la extrema derecha, activó inmediatamente el micrófono y marcó distancia con Almeida. Prefirió abrir la negociación a todo el arco parlamentario: “La política no va de ajedrez o de escenas. Buscamos el apoyo de todos”.

La demora en la presentación de las cuentas, explicaron fuentes del área de Hacienda, se debió a la sentencia del Tribunal Constitucional del pasado 3 de noviembre sobre el impuesto de plusvalías, el que se cobra cuando una propiedad se vende, se hereda o se dona, y que ha hecho que se apruebe un nuevo decreto ley que ha obligado a las corporaciones municipales a rehacer sus previsiones de ingresos con este tributo. Tras un ajuste de 200 millones, ¿qué presupuesto tendrá entonces cada concejalía para 2022?

Por partes. Para cuadrar las cuentas, el área de Hacienda ha previsto un crecimiento económico en la ciudad del 5,7% para 2022. Basándose en esta pujanza, el capítulo de ingresos que prevé Almeida para el año que viene es de 5.762 millones, un 6,1% más que este año, a pesar del tijeretazo del impuesto de plusvalías y de dejar de ingresar 166 millones por sus políticas liberales de bajada de impuestos locales, como el de bienes e inmuebles, retocado a la baja nuevamente hace solo unas semanas. El crecimiento de seis puntos viene, fundamentalmente, de la partida de ingresos que aporta el Estado al Ayuntamiento: 2.025 millones frente a los 1.772 de este año, 253 más.

La concejalía que más crece es Obras y equipamientos, que contará el próximo año con una partida de 491 millones ―70 más que el pasado año— y que supone un incremento del 16,7%. El ejecutivo local tiene en mente la finalización de la reforma del Nudo Norte, la peatonalización definitiva y prometida de la Puerta del Sol, la culminación del cubrimiento de la M-30 a su paso por el antiguo estadio Vicente Calderón y el inicio del desmantelamiento del paso elevado de Pedro Bosch, entre otros.

La segunda área que más crece en porcentaje es Hacienda, con un 12,7% y un presupuesto de 361 millones, 41 más que 2020. El motivo es el de guardar un remanente de 70 millones para situaciones adversas en el próximo año. En 2020 el remanente fue 10 millones. El caudal para los distritos también se eleva hasta los 838 millones, un 8,8% más. Además, los 30.000 empleados públicos municipales, y que suponen una partida de 1.793 millones, contarán con una subida del 2% de su salario.

El área de mayor peso es Medio Ambiente, que recoge casi uno de cada tres euros del presupuesto, el 28,7% (1.573 millones). Cultura, aunque ve aumentada su partida levemente, no llega al 3% del presupuesto, (2,9%). El área de Familias y sobre el que recae el peso de la gestión de la pospandemia, las colas del hambre y la ejecución de las ayudas municipales, recibirá 302,45 millones, 15 millones más que en 2020. O dicho de otra manera: el 5,2% del total de la partida. Por distritos, Latina, que es el que más vecinos tiene de toda la capital con más de 230.000 vecinos, se convierte en el perímetro de la capital que más caudal de fondos recibirá con 73,44 millones, nueve millones más que en 2020. A la cola se sitúa Barajas, con 18.

Estos son, en líneas generales, los nuevos presupuestos, que contemplan a lo lejos el mes de diciembre como la fecha límite marcada por Almeida y Villacís para contar con el visto bueno de cuatro ediles de la oposición que los saquen adelante.

Los partidos de izquierda

Los partidos de izquierda de la oposición (Más Madrid, PSOE y Recupera Madrid) se mostraron reacios a las cuentas de 2022 planteadas por Almeida y Villacís. Vox, que aglutina la principal mirada del alcalde para sacarlos adelante, guarda silencio. “Los presupuestos de Almeida son, sencillamente, una estafa”, ha dicho la portavoz de Más Madrid, Rita Maestre. “Menos ingresos son menos gastos. Es un presupuesto vacío, falso, que no recoge ningún proyecto transformador para la ciudad de Madrid. Carecen de la ambición que necesitan los retos de nuestra ciudad”. La portavoz del PSOE, Mar Espinar, también fue tajante: “Son unos presupuestos que se venden muy bien a bombo y platillo, pero tras escuchar al equipo de Gobierno sigue fallando mucha melodía, mucho fondo (…) Una vez conozcamos la melodía por supuesto pondremos todo nuestro empeño en apoyar unos presupuestos que reequilibren territorialmente la ciudad”. Los cuatro ediles que se marcharon de Ahora Madrid al Grupo Mixto y constituyen la plataforma Recupera Madrid se mostraron abiertos a aprobar las cuentas, con salvedades. Solicitan a Almeida que se congelen “los disparatados sueldos” de los altos directivos, concejales y del alcalde, y que los autobuses públicos de la EMT sean gratuitos en las horas punta “en tanto se rebajen esos atascos” que se dan en la ciudad. La negociación, con el silencio de Vox, acaba de comenzar.

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