Gan Pampols, vicepresidente para la dana, sostiene que “un plan de alerta ordinario” habría salvado vidas
El general retirado y consejero valenciano asegura que no va “a cobrar como cuando estaba activo” aunque dice desconocer cuál es su sueldo, y anuncia un plan para la reconstrucción
El teniente general retirado y vicepresidente para la Reconstrucción, Francisco José Gan Pampols, ha comparecido este lunes por primera vez ante los medios, tras su nombramiento oficial el 22 de noviembre por parte de la Gener...
El teniente general retirado y vicepresidente para la Reconstrucción, Francisco José Gan Pampols, ha comparecido este lunes por primera vez ante los medios, tras su nombramiento oficial el 22 de noviembre por parte de la Generalitat Valenciana. No ha evitado ninguna pregunta, pero tampoco ha aclarado algunas cuestiones polémicas, en un acto que tenía como finalidad presentar su Plan Marco de Actuación de Reconstrucción económica y social para aplicar en los 562 kilómetros donde viven las 845.000 personas afectadas directa o indirectamente por la dana, que causó 222 muertos y cuatro desaparecidos en la provincia de Valencia. Una zona que el fichaje de Carlos Mazón, presidente de la Generalitat, para contrarrestar las críticas a su gestión y cambiar el relato hacia la reconstrucción, empezará a visitar este mismo lunes en Massanassa, donde se reunirá con su alcalde, Paco Comes, también del PP. Se trata del primero de sus próximos encuentros municipales.
¿Funcionaron los planes de alerta?. “No, por muchos motivos”, ha respondido. “Una cosa es la afectación, que esa es imposible de prever, y otra son las pérdidas de vidas, que esas en un plan de alerta ordinario, lógicamente se podían haber salvado, o unas cuantas, no todas. Como saben, ha muerto gente que vivía en bajos de casas que no tenía a nadie que la conociera y ha fallecido ahogada”, ha argumentado. Algunas personas se habrían podido salvar “con toda seguridad”, ha subrayado.
El vicepresidente ha explicado que un plan prevención significa que todo lo relacionado con infraestructuras de prevención se actualiza periódicamente, se aplica innovación y se contrasta, porque “lo que no se prueba no funciona”. Además, ha indicado que toda la estructura de prevención se basa en procedimientos, personas, sistemas de comunicaciones, de información automática, “pero sobre todo, sobre todo, en un sistema de toma de decisiones que sea transparente, claro, que no haya nunca una duda respecto a qué hacer”.
Muy a su pesar, el polémico asunto de su sueldo ha centrado parte de su comparecencia. “No voy a cobrar como cuando estaba activo, de ninguna de las maneras”, ha afirmado. Ahora bien, no renuncia a los derechos consolidadas, como los trienios (acumula 15), ha apostillado, antes de parafrasear un verso de Calderón de la Barca. En un elogio de la vida militar, el dramaturgo del siglo XVIII escribió: “Aquí la más principal/ hazaña es obedecer,/ y el modo cómo ha de ser/ es ni pedir ni rehusar”. Pampols ha admitido desconocer cuál es su sueldo como vicepresidente, ha indicado que solo se le pidió su última nómina de cuando estaba en activo (de 2019, asciende a cerca de 92.000 euros) y ha aseverado que no ha “negociado ninguna retribución para venir aquí”.
El teniente general retirado considera que la polémica obedece a un “error de comunicación”. No se “ha explicado bien” que esa modificación del tope salarial “se ha venido haciendo a lo largo del tiempo para adecuar sucesivas retribuciones del personal que pasa de una administración a otra”, ha agregado. No obstante, la ley valenciana indica que los consejeros y altos cargos de la administración autonómica, en el caso de ser funcionarios, pueden percibir el mismo sueldo que cobraban en su puesto de origen, sin trienios, siempre que este no supere el 15% por encima del salario del presidente, que es de 80.173,92 euros anuales. En el decreto publicado el pasado martes, ese límite “no será de aplicación a las personas que integran el Consell y al nivel de los órganos superiores de las consejerías”.
Gan Pampols también ha querido resaltar el trabajo realizado hasta el momento por la Generalitat, que ha retirado 15.000 toneladas de residuos al día (cuando en Valencia ciudad se recogen 12.000 en un año). Entiende a la ciudadanía, pero hay que priorizar. Primero, las personas, luego los polígonos industriales, porque es básico reactivar la economía, y luego los autónomos, el eslabón “más débil”. “Todo el mundo quiere tener el garaje limpio, pero la prioridad es desatascar los colectores porque si no la gente no puede ir al baño”, ha dicho para ilustrar su discurso sobre la importancia de reparar las depuradoras y los colectores, por ejemplo. Además, ha informado de que se han abierto 6.005 expedientes de revisión de viviendas por el momento, se han declarado 1.658 como no habitables y se han desalojado 492 por problemas estructurales. Hubo casi 37.000 personas rescatadas. También ha ponderado el trabajo de las fuerzas armadas en 4.300 misiones.
El vicepresidente de la Generalitat ha manifestado, además, que ofrecerá a todos los partidos formar de equipos de trabajo en un plan de actuación en el que el “centro de gravedad” es “la población afectada”. Cuando los programas para la reconstrucción estén “en marcha y en funcionamiento”, su trabajo en el Consell “habrá terminado”. Así, ha avanzado que, cuando la situación de reconstrucción tras la dana se haya “normalizado”, convocará una rueda de prensa para despedirse de los medios de comunicación porque, según ha señalado, su departamento “no tiene continuidad”. “Es un estado de excepción administrativo”, ha sostenido.