Bomberos del Consorcio de Valencia: “Estábamos mal y la dana nos ha acabado de ahogar”
El sindicato UGT echa en falta un mando único y critica la falta de personal y medios desde hace años en el cuerpo de emergencia
“Estábamos mal y la dana nos ha acabado de ahogar. No podemos seguir así, no aguantamos más. Es muy frustrante querer ir a ayudar y no poder por falta de medios y queremos hacerlo visible porque los bomberos necesitamos ayuda y los únicos que pueden hacerlo son los ciudadanos”, ha denunciado este viernes Helios Martín, bombero del Consorcio Provincial de Bomberos de Valencia (CPBV) y delegado de UGT, sindicato que ha criticado duramente el déficit de personal y de medios materiales que arrastra el cuerpo y que ha quedado más patente todavía durante la emergencia del pasado 29 de octubre.
Pasado un mes de la tragedia, los bomberos recuerdan las primeras horas de aquel martes en que la dana y la riada arrasó todo a su paso. A Antonio Segovia, bombero de guardia el 29, la alarma lanzada por la Generalitat a las 20,11 horas le pilló con cientos de personas atrapadas en la A3, con el agua por las rodillas y con informaciones sobre una posible rotura de la presa de Forata. “La gente ya había entrado en pánico y en ese momento sonaron cientos de alarmas a la vez. Si te soy sincero hubo más risas que otra cosa. Creo que la gente intentó quitarse tensión y le entró la risa. ‘¿Esto qué es, esto qué es?’ preguntaba la gente. Pues eso, que llevábamos atrapados al menos una hora”, recuerda este bombero y sindicalista. A Vicent Alapont, coordinador del grupo de rescate de altura GERA en el Consorcio, el aviso le sonó en la localidad de Guadassuar, cuando sacaba a una familia de dentro de un horno. “No sabía ni lo que era. Pensé que era el móvil de mi compañero. El agua nos llegaba por el pecho”.
Los delegados sindicales de UGT del Consorcio denuncian un déficit de plantillas y material estructural. Un estudio encargado por la federación de Serveis Públics a la Universitat de València en 2020 ya advertía de que la plantilla operativa del CPBV estaba muy por debajo de la media nacional, con solo 625 efectivos operativos a la espera de que se incorporen nuevos bomberos de procesos selectivos en marcha. La plantilla teórica es de 785 pero hay 125 plazas sin ocupar, afirma la organización sindical. Según UGT, el día de la dana había 115 efectivos disponibles “por lo que el Consorcio afrontó la jornada de la emergencia con una dotación de personal por debajo de las necesidades”.
Marcel Montero, secretario general de la sección sindical de UGT en el CPBV, ha pedido a las Administraciones que unifiquen los seis cuerpos de bomberos que hay en la Comunidad Valenciana, con un modelo parecido al implantado por Madrid o Cataluña. “Necesitamos que esos seis cuerpos puedan trabajar conjuntamente y todos los días, no solo el día de la dana. Tengo que poder trabajar con mis compañeros de Alicante, que están a 30 kilómetros de uno de mis parques”, añade Vicent Alapont, que considera que el consorcio ha sido “el patito feo” de las Administraciones.
Reclaman más presupuesto para estar mejor preparados, aunque reconocen que la magnitud de la tragedia del 29 de octubre estuvo “por encima de cualquier capacidad operativa de cualquier servicio del mundo”. El coordinador del GERA estuvo toda la noche con otros compañeros rescatando a personas en Guadassuar y al día siguiente oyó las declaraciones de una vecina de que por su calle no había ido nadie. “Y es verdad, a lo mejor estábamos en la de al lado, sacando gente toda la noche. Pero eso no quita que se tenga que invertir más presupuesto en el servicio de bomberos porque salvamos vidas, nos dedicamos a eso”, añade. La falta de neoprenos, por ejemplo, redujo el número de intervenciones aquel martes.
El CPBV lo financia en un 50% la Diputación de Valencia, en un 20% los municipios consorciados y el resto depende de la Generalitat, según Helios Martín. “El problema de depender de más de una Administración es que ninguna lo asume como propio sino como algo impuesto. Si perteneciésemos a una sola, creemos que sería diferente: la solución sería que la Generalitat asumiese la competencia de bomberos, todos bajo el mismo paraguas y un mando único. Ahí entraría toda la emergencia”, apunta este bombero.
Segovia recuerda lo desbordados que estaban en las primeras horas. “Una vez sale el sol, vemos lo que hay porque esa noche no éramos conscientes de la dimensión. Necesitamos más bomberos”, subraya al tiempo que lamenta que cada cuatro años se vean expuestos a cambios políticos. “Suelen ser personas que no vienen del mundo de la emergencia y tienes que dedicarle mucho tiempo enseñándoles las necesidades que tenemos”. Quieren que el mando técnico, el cálculo de sus necesidades, dependa de los bomberos.
Los efectivos del Consorcio reclaman desde hace tiempo una unidad especializada y bien dotada en rescates en el agua porque la ley autonómica les atribuye competencias para ello. Explican que el consorcio de Castellón y el de la ciudad de Valencia lo tienen, pero ellos no, cuando en la provincia de Valencia hay decenas de ríos, embalses y ramblas. Necesitan también formación. “Para el grupo de rescate acuático se nos ha dotado de dos zodiac y la única formación que hemos recibido ha sido una práctica en seco en el mismo patio de la unidad”, describe Marcel Montero.
Los delegados sindicales de UGT critican además la falta de coordinación en medio del fragor de la emergencia. Helios Martín coordinó uno de los sectores en la zona cero y cuenta que tenía que improvisar, echando el alto a la maquinaria pesada que había sobre el terreno para pedirles por favor que les quitara obstáculos y abrir así al paso las calles. “Se supone que hay unos contratos de urgencia para que, en cuestión de dos o tres días, estén trabajando, pues hoy hemos cumplido un mes y aún los medios que nos destinan son escasos y cuando llegan nos dicen que no están preparados porque no han recibido el curso de prevención de riesgos. ¿En serio?, ¿Qué tenemos que esperar, un mes más?”, concluye.
Los bomberos han puesto en cuestión la comparecencia del presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, el pasdo 15 de noviembre en las Cortes Valencianas cuando dijo que el primer rescate del Consorcio Provincial de Bomberos se hizo a las 14.29. Marcel Montero ha mantenido que el primer rescate urbano en lluvias se hizo en la N-322, en Requena, a les 6.44 de la mañana del día 29. El helicóptero de la GERA se movilizó a partir de las siete de la mañana y se activó a las 9 horas. “Los bomberos estuvimos trabajando desde las siete de la mañana y la alarma sonó a partir de las 20 horas, esto es bastante aclaratorio”.