Los vecinos pueden acceder al garaje del edificio incendiado en Valencia y a viviendas municipales
“Aún hay una comunidad de propietarios hasta que se nos diga que el edificio está en ruinas”, afirma el presidente en la primera reunión de los damnificados, con cerca de 200 asistentes
Siguen muy afectados por el pavoroso incendio que el pasado jueves borró de un plumazo sus viviendas, sus pertenencias, sus recuerdos, todo. “Estamos muy mal todos, muy afectados y nerviosos y cada uno responde como puede. Y encima hay personas que han fallecido, que es lo peor”, reconocía Ana María Vela, una de las vecinas damnificadas por el fuego. Intentan organizarse y por ello a mediodía de este sábado, tras los cin...
Siguen muy afectados por el pavoroso incendio que el pasado jueves borró de un plumazo sus viviendas, sus pertenencias, sus recuerdos, todo. “Estamos muy mal todos, muy afectados y nerviosos y cada uno responde como puede. Y encima hay personas que han fallecido, que es lo peor”, reconocía Ana María Vela, una de las vecinas damnificadas por el fuego. Intentan organizarse y por ello a mediodía de este sábado, tras los cinco minutos de silencio que se guardaron en señal de duelo por las víctimas, anunciaba una reunión para esa misma tarde. “Tenemos muchas cosas de las que hablar: seguros, hipotecas…”, apunta serena.
“Aún existe una comunidad de propietarios hasta que se nos diga que el edificio está en ruinas”, afirmaba horas más tarde Emilio Verdejo, presidente de la comunidad de propietarios en un receso del encuentro vespertino al que asistieron alrededor de 200 personas. La declaración de ruina es importante a efectos de los seguros y eso lo tienen que “decir los profesionales”, ha agregado, visiblemente cansado. El representante ha señalado que el 70% de los asistentes a la reunión son propietarios, y el resto, inquilinos.
La mayoría de vecinos permanecen desde el jueves alojados en un gran hotel de la capital, el SH Valencia Palace, de cinco estrellas. La primera noche llegaron 36, luego fueron 38 y el viernes por la noche ya eran 114 en total. En el edificio incendiado vivían unas 450 personas. La próxima semana ya se podrá acceder a una de las 131 viviendas municipales del edificio que compró por 20 millones el Ayuntamiento de Valencia por derecho de tanteo. “Será una cesión y las viviendas ya están preparadas para ser habitadas” por el tiempo que sea necesario, sin distinciones entre inquilinos y propietarios, ha explicado la concejala de Recursos Humanos, Julia Climent, del PP, que ha informado a los propietarios en los últimos minutos de la reunión. Entre los representantes municipales también se encontraba el teniente alcalde de Vox, Juan Manuel Badenas, entre otros.
Verdejo ha reconocido que en la reunión ha habido “un poco de lío” entre los propietarios y los inquilinos — “ya os podéis imaginar el desastre”, ha apostillado—. Ha habido momentos de mucha tensión entre ambos. Las primeras diferencias se han evidenciado cuando se ha planteado si las indemnizaciones también llegarán a los inquilinos por sus enseres, entre otras cuestiones, según fuentes presentes en el encuentro celebrado en el citado hotel. El Ayuntamiento ha informado de que a partir del lunes se podía acceder al garaje del edificio siniestrado, que no fue afectado por las llamas, al igual que los bajos comerciales. Pero este mismo sábado, algunos ya han podido retirar sus vehículos. Algunos vecinos han comentado que no tuvieron tiempo de sacar de casa las llaves de sus coches. Verdejo ha agradecido el trato de los políticos desde el principio y ha manifestado que serán los técnicos los que certifiquen si había una “deficiencias en la construcción” del edificio de 2008, en el que entró a vivir en 2009.
Ana María Vela pedía en que el incendio “no se convierta en una cuestión mediática y en 20 días se olvide” y en conseguir “una ayuda especial” frente a los bancos. “Conmigo ya se han puesto en contacto y el lunes ya me dirán”, reconoce. Virginia, de 35 años, y Raimundo, de 38, perdieron su casa y se acercaron a primera hora del sábado a la oficina que el Ayuntamiento ha abierto en su sede de Tabacalera para asesorar y apoyar administrativamente a los afectados. “Hemos venido a por asesoramiento jurídico porque andamos muy perdidos. Somos propietarios y necesitamos saber cómo seguir con nuestra vida porque lo teníamos todo allí dentro”, dice ella. Están de momento en casa de los padres de la joven porque su hijo es muy pequeño “y queremos darle un poco de normalidad”. No saben nada todavía del estado de los dos coches que tenían aparcados en el garaje del inmueble. Compraron la casa hace diez años, pero les queda por pagar 30 años de hipoteca. “Nos han dicho en la oficina que hablemos con nuestro banco”, apunta mientras asegura que no tiene noticia del edificio municipal que el Ayuntamiento ofrece.
En casa de un familiar
Vicente Barberán, de 55 años, otro propietario de un piso en la segunda planta del inmueble calcinado, está durmiendo en casa de un familiar. “No tengo claro si nos van a dar la opción de comprar o alquilar o se trata de otra fórmula”, apostillaba por la mañana. Lo único que sabe es que llevaba pagados diez años de hipoteca y le quedaban otros tantos para saldarla. “Los recibos se siguen pagando, tal vez haya alguna carencia, lo tengo que mirar el lunes”, confiesa. “Estoy asimilándolo todo todavía, estoy hundido. Tengo que encontrar un sitio donde vivir”.
La asociación de usuarios financieros Asufin ha pedido a los bancos que apliquen las carencias necesarias y sean flexibles con las hipotecas contratadas por los afectados por el incendio, ya que la desaparición de la vivienda no exime del pago de las cuotas. Y la Asociación Española de Consumidores ha pedido la paralización de los cobros de hipotecas a los afectados por “concienciación y humanidad” hasta que los seguros se hagan cargo del pago de las cantidades restantes.
Además, el Gobierno valenciano tiene previsto aprobar este lunes un decreto de ayudas a los vecinos, de entre 6.000 y 10.000 euros por familia (en función de los miembros) para que compren las pertenencias más urgentes. Algunos salieron solo con el pijama y sin documentación. Además se van a aprobar ayudas al alquiler de entre 1.000 y 1.500 euros mensuales.