LAS CRISIS DEL CORONAVIRUS

Los ‘festeros’ renuncian a celebrar las Hogueras de Alicante por las restricciones de la pandemia

En una votación interna, un 83% de las comisiones organizadoras decide suspender las fiestas definitivamente, tras sugerir el ayuntamiento trasladarlas a después de septiembre

Artistas fogueros dando los últimos retoques a una hoguera de hace dos años.Morell (EFE)

Alicante tampoco celebrará este año sus fiestas más tradicionales, las Hogueras de San Juan. Han sido sus propios organizadores, las comisiones que se agrupan en la Federació de Fogueres, quienes han decidido aplazarlas hasta 2022, tras una consulta en la que se les ofrecía la posibilidad de trasladar parte de sus actos al segundo semestre del año, a partir de septiembre, en medio aún de la incertidumbre de la pandemia y con un programa recortado por las restricciones sanitarias. Una ...

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Alicante tampoco celebrará este año sus fiestas más tradicionales, las Hogueras de San Juan. Han sido sus propios organizadores, las comisiones que se agrupan en la Federació de Fogueres, quienes han decidido aplazarlas hasta 2022, tras una consulta en la que se les ofrecía la posibilidad de trasladar parte de sus actos al segundo semestre del año, a partir de septiembre, en medio aún de la incertidumbre de la pandemia y con un programa recortado por las restricciones sanitarias. Una abrumadora mayoría, el 82,96%, ha votado por la cancelación. Y, por tanto, el Ayuntamiento de Alicante ha decretado la “suspensión definitiva” por segundo año consecutivo.

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El decreto firmado por el alcalde, Luis Barcala, alude a la “incertidumbre y la inseguridad” en que se encuentran los festeros alicantinos, pese a los inmejorables indicadores sanitarios con que cuentan la ciudad y la provincia de Alicante, muy por debajo de la media española. Pese a todo, la prudencia había llevado al consistorio a trasladar a las comisiones que en cualquier fecha de 2021 iba a ser imposible lanzar las célebres mascletaes –espectáculos de fuegos artificiales diurnos- diarias, para no congregar a multitudes. Tampoco se iban a poder celebrar las tradicionales verbenas en las barracas de cada comisión, por las limitaciones de aforo y de horarios obligadas por la prevención sanitaria, ni los desfiles u ofrendas de flores que forman parte del programa tradicional. Las Hogueras quedaban, así, limitadas a la plantà de los monumentos y su cremà, con cena silenciosa en las barracas y toque de queda.

La Federación de Hogueras decidió consultar a sus integrantes y resumió la situación en dos preguntas. La primera, si querían fiestas con restricciones o suspenderlas hasta 2022. De las 135 asociaciones participantes, 112 votaron por el aplazamiento. En esta decisión han pesado, según las fuentes consultadas, varios factores. Trasladar las fiestas a después de septiembre, mes en el que sí se celebrarán las Fallas de Valencia, trastocaba por completo la idiosincrasia de una tradición que no tiene cabida en otoño, con el curso escolar ya en marcha, sin un clima innegablemente estival y con una programación bajo mínimos.

La segunda pregunta de la encuesta planteaba la posibilidad de plantar, en cualquier caso, el monumento oficial de la plaza del Ayuntamiento en las fechas tradicionales, entre el 21 y el 24 de junio, con el fin de atraer turistas, por un lado, y de dar algo de aliento a los artistas, ahogados por su situación económica y con los almacenes llenos de los ninots que estaban preparando para las fiestas de 2020, canceladas también por la pandemia. En esta ocasión, el 19,26% de las asociaciones se mostraron a favor, el 60% en contra y un 20,74 se abstuvo.

La votación ha obtenido el respaldo de ayuntamiento y de la Federación. Barcala indica que su equipo de gobierno coincide con “los criterios de responsabilidad y sensatez del mundo de la fiesta”, a pesar de que califica la decisión de “dolorosa”. Y no solo en el ámbito tradicional, también en el económico. Según un estudio realizado por la Universidad de Alicante, las Hogueras de San Juan aportan 40 millones de euros a la ciudad cada año. Y ya van dos en blanco.

También en el apartado económico, el gremio más afectado es el de los artistas, creadores de los monumentos. Tras la resolución de hoy, el concejal de Fiestas, Manuel Jiménez, ha anunciado una subvención de más de 600.000 euros para “sufragar gastos de almacenaje y mantenimiento” a favor de los artistas, en su principal partida. Además, creará una línea de ayudas para las comisiones de hogueras y barracas.

La negativa de los organizadores de la fiesta pone en el horizonte el “objetivo de poder disfrutar en 2022” de las Hogueras, avanza Toñi Martín-Zarco, presidenta de la Federació de Fogueres. También adelanta que seguirán trabajando para la celebración de algunas de las actividades del programa de fiestas, “siempre y cuando sea posible” y siempre ligadas a las “circunstancias sanitarias”. El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, ha mostrado su solidaridad con la ciudad en un tuit en el que apela a “consenso, esfuerzo y responsabilidad”. “Alicante celebrará sus Fogueres en 2022”, continúa el jefe del gobierno valenciano, “y serán inolvidables”.

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