Dos detenidos por acceder con su vehículo a la T1 del aeropuerto de El Prat

Dos personas han accedido esta madrugada, a las cinco de la madrugada, con su vehículo a la zona intermodal de la terminal 1 del aeropuerto de El Prat de Barcelona, donde solo pueden circular autobuses, taxis y está la conexión con el metro. El vehículo ha entrado por las puertas giratorias y ha quedado aparcado delante de las escaleras mecánicas, según se puede ver en una fotografía difundida por los Mossos d’Esquadra. Nadie ha resultado herido.

Uno de los detenidos ha hecho una “proclama de tipo islamista al ser detenido”, según ha explicado el comisario jefe de los Mossos, Eduard Sal...

Dos personas han accedido esta madrugada, a las cinco de la madrugada, con su vehículo a la zona intermodal de la terminal 1 del aeropuerto de El Prat de Barcelona, donde solo pueden circular autobuses, taxis y está la conexión con el metro. El vehículo ha entrado por las puertas giratorias y ha quedado aparcado delante de las escaleras mecánicas, según se puede ver en una fotografía difundida por los Mossos d’Esquadra. Nadie ha resultado herido.

Uno de los detenidos ha hecho una “proclama de tipo islamista al ser detenido”, según ha explicado el comisario jefe de los Mossos, Eduard Sallent, en rueda de prensa. La policía catalana ha informado a la Audiencia Nacional y al juzgado de guardia de El Prat sobre lo ocurrido. A las tres de la tarde, los Mossos han informado de que descartan el móvil terrorista en la actuación de los dos hombres, de origen albanés, y sin antecedentes por terrorismo. Uno de ellos, que estaba muy agitado en el momento del arresto, ha dado positivo en el test de drogas.

Los dos pasajeros del coche han sido detenidos, con gran resistencia, según fuentes policiales. Los artificieros de los Mossos d’Esquadra, los TEDAX, han comprobado que en el coche no había explosivos. El aeropuerto funciona con normalidad y el acceso en la planta cero al metro está cerrado. El incidente se ha producido a una hora, las cinco de la madrugada, y en un contexto, con el confinamiento decretado por el coronavirus, en el que la infraestructura estaba prácticamente vacía.