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Sánchez reta a los gobiernos progresistas a “abrazar el multilateralismo” frente a la ofensiva de Trump

El presidente del Gobierno participa en una cumbre de líderes progresistas en busca de una respuesta frente al populismo de derechas

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, este viernes en Londres.Foto: Dan Kitwood (Getty Images) | Vídeo: EPV

El primer ministro británico, Keir Starmer, ha dado de nuevo la bienvenida a Londres este viernes al presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, con un reconocimiento especial: lo ha presentado como el ejemplo de “liderazgo progresista” y la prueba de que la política de centroi...

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El primer ministro británico, Keir Starmer, ha dado de nuevo la bienvenida a Londres este viernes al presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, con un reconocimiento especial: lo ha presentado como el ejemplo de “liderazgo progresista” y la prueba de que la política de centroizquierda “no está desapareciendo en el mundo”.

Sánchez se ha mostrado a gusto en un encuentro de personalidades de izquierdas que le ha permitido defender cómodamente su visión política. “Hoy Estados Unidos se está alejando, y tenemos una gran oportunidad en la Unión Europea para rellenar ese hueco y abrazar el multilateralismo. Esa es hoy la principal tarea de los gobiernos progresistas”, ha dicho entre aplausos el presidente del Gobierno español.

Aunque la reacción más cálida del auditorio londinense se ha producido cuando Sánchez ha celebrado la comodidad que siente al sentirse arropado por las fuerzas progresistas en su defensa de la causa palestina: “Me siento tan orgulloso de pertenecer a una familia de gobiernos que ha reconocido al Estado palestino con la misma convicción y coherencia con la que han defendido la causa de Ucrania después de la invasión de Putin”, ha dicho Sánchez.

En una conferencia que buscaba abordar respuestas de izquierda a un desafío global como es la inmigración irregular, el presidente del Gobierno español ha querido dejar claro que España también combate este fenómeno, pero que “el mejor modo de combatir el tráfico ilegal de personas es acudir a los países de origen y de tránsito, y colaborar con ellos y ayudarlos, para que sean capaces de crear oportunidades para sus ciudadanos y, a la vez, permitir un flujo ordenado de migración regular que aporte el capital laboral humano que necesitan nuestros países para su crecimiento económico”.

De este modo, ha concluido Sánchez, todas esas personas podrán luego regresar formados a sus lugares de origen y crear las condiciones necesarias para su propio desarrollo económico.

El presidente del Gobierno español ha presentado la desigualdad como el mayor desafío al que hacen frente hoy los gobiernos, y ha atribuido a la actual crisis de la vivienda un peso de hasta el 60% en el sufrimiento actual de los jóvenes y de los ciudadanos comunes de España.

Sánchez ha defendido la virtud de construir coaliciones, y ha recordado al público londinense que atendía su mesa redonda que lleva siete años al frente de un Gobierno minoritario de coalición, “sin una mayoría parlamentaria clara”, al que, sin embargo, le ha ido bien hasta ahora, y ha sido capaz de sacar adelante reformas en el sistema laboral, de pensiones, educativo y científico.

Todas esas reformas, ha defendido Sánchez, han salido adelante sin contestación social, “a base de dialogar y acordar con sindicatos, sociedad civil y asociaciones empresariales”.

Frente a la ofensiva negacionista de la extrema derecha, que pone en cuestión la lucha contra el cambio climático, el presidente del Gobierno ha reclamado a las fuerzas progresistas que respondan “con datos y con hechos concretos”. En los últimos siete años, ha señalado Sánchez, el precio de la electricidad se ha reducido en un 50% gracias a las renovables (a las que Trump declaró la guerra en su discurso ante la Asamblea General de la ONU la semana pasada). “Hay gobiernos progresistas por todo el mundo que están demostrando que hay otro modo de hacer las cosas”, ha señalado.

La Cumbre de Acción Para el Progreso Global, convocada en Londres, se ha presentado como el encuentro necesario de la socialdemocracia para hacer frente a los grandes desafíos de la actualidad, pero sobre todo para dar ya una respuesta al creciente desafío que supone en muchas sociedades occidentales el auge del populismo de derechas, y en algunos casos de la ultraderecha xenófoba.

El presidente del Gobierno español, que ha hecho escala en Londres en su viaje de regreso desde Nueva York, donde ha participado en la Asamblea General de Naciones Unidas, se ha sumado a un encuentro que ha reunido en la capital británica a líderes y exlíderes progresistas internacionales, como el primer ministro británico, Keir Starmer, el primer ministro de Australia, Anthony Albanese, el canadiense, Mark Carney, o la danesa, Mette Frederiksen.

Sánchez ha participado como ponente en una de las mesas redondas organizadas a lo largo de la jornada, titulada “El futuro del multilateralismo: una coalición para abordar retos globales”, en la que también ha estado presente la exprimera ministra de Nueva Zelanda, Jacinda Arden, y el histórico asesor de previas administraciones estadounidenses demócratas y actual director del Centro para el Progreso Americano (CAP, en sus siglas en inglés), John Podesta.

En la apretada agenda del presidente del Gobierno en Londres se han incluido encuentros bilaterales con Carney y Albanese.

La Cumbre de Acción para el Progreso Global ha sido impulsada por el centro de pensamiento Labour Together, un grupo al que pertenecen muchos de los principales ministros del actual Gobierno laborista británico. La organización tuvo un papel clave en la conquista de Starmer del liderazgo del Partido Laborista y de la desaparición de la anterior dirección, a cuyo frente estaba el veterano izquierdista Jeremy Corbyn.

Labour Together ha sumado fuerzas con el CAP, una institución que promueve políticas progresistas en Estados Unidos.

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