El Monumento Natural de Las Médulas se enfrentó al fuego con un plan caducado desde 2022
La Junta de Castilla y León no actualizó los programas de gestión de recursos que se le exige para este conjunto Patrimonio de la Humanidad
El Monumento Natural y Espacio Cultural de Las Médulas (León), gravemente dañado por los incendios que han arrasado este verano Castilla y León, tiene caducado desde 2022 el Plan de Ordenación de Recursos Naturales (PORN), obligatorio según la Junta, y carece del Programa Rector de Uso y Gestión (PRUG), también exigido por ley autonómica. Este conjunto Patrimonio de la Humanidad, gestionado por la Administración autonómica a través de la Fundación Patr...
El Monumento Natural y Espacio Cultural de Las Médulas (León), gravemente dañado por los incendios que han arrasado este verano Castilla y León, tiene caducado desde 2022 el Plan de Ordenación de Recursos Naturales (PORN), obligatorio según la Junta, y carece del Programa Rector de Uso y Gestión (PRUG), también exigido por ley autonómica. Este conjunto Patrimonio de la Humanidad, gestionado por la Administración autonómica a través de la Fundación Patrimonio Natural, del área de Medio Ambiente y de la Fundación Las Médulas, de la Consejería de Cultura, implica a los municipios de Carucedo, Borrenes y Puente de Domingo Flórez. Estas localidades están incluidas en listados autonómicos de riesgo de fuego y forzados a tener planes específicos de prevención. Solo Carucedo, y en trámite, ha avanzado sobre ello, según reveló elDiario.es.
La falta de actualización del PORN dificulta, según los expertos, que puedan aplicarse medidas de prevención o de gestión de incendios, prácticamente inexistentes en el plan vencido, aprobado en 2002. La única mención al fuego en el plan caducado se presenta así: “Desarrollar las medidas necesarias para la prevención y extinción de incendios forestales en el interior del Espacio Natural, procurando que las actuaciones preventivas minimicen su impacto paisajístico”. Como complemento, añade que se deben “establecer acciones silvícolas que mejoren la regeneración de la vegetación arbórea del Espacio Natural como resultado de los procesos de abandono de la actividad agraria”. Varios vecinos y bomberos han denunciado que la masa forestal de Las Médulas, un paisaje de gran singularidad, producto de la explotación de unas minas de oro romanas, estaba desatendida. La Junta no ha respondido a las preguntas de este periódico.
La Ley autonómica de Patrimonio Natural 4/2015 marca que los espacios naturales protegidos deben poseer un PORN y un PRUG, al igual que los Parques Nacionales, según la Ley 42/2007. El Plan de Ordenación de Las Médulas caducó en 2022 y no ha sido renovado pese a que la norma ordena actualizarlo cada 20 años. Un extrabajador de Patrimonio Natural explica que es “necesario que tengan estos planes porque es lo que hace que un espacio natural sea espacio natural, tiene directrices y una normativa relativamente abierta porque dura 20 años”.
Los PRUG son “más precisos y se regulan cada cinco años” y ayudan a gestionar de forma cercana, pero en Castilla y León no hay”. “Este plan se puede usar como diagnóstico e incluir acciones como desbrozamientos, son muy útiles y no entiendo que no tengan aprobado ninguno”, agrega. Él dejó el cargo porque se metía “más dinero en miradores, la foto es más importante que la gestión, los votos son los votos”. El extrabajador suspira: “Está todo en la ley. Solo habría que cumplirla”. El presidente, Alfonso Fernández Mañueco (PP), ha anunciado una reconstrucción para que Las Médulas recuperen “su esplendor” y ha prometido que estarán “igual o mejor que hace unos meses” pese a que se han perdido árboles de décadas.
Esta inacción legislativa debilita a Las Médulas, reconocidas por la Unesco desde 1997, asegura Alfonso Fernández-Manso, catedrático de Ingeniería Agroforestal en la Universidad de León: “Debería estar amparado por una estrategia de preservación que combine conservación arqueológica, gestión del uso público y prevención de emergencias”. “La caducidad del PORN y la ausencia de PRUG no invalidan la protección legal del espacio como Monumento Natural y Patrimonio de la Humanidad, pero debilitan la capacidad de gestión, ralentizan la respuesta y abren un frente de inseguridad jurídica y administrativa preocupante en un momento crítico tras el incendio”, sostiene el experto sobre estas minas de oro romanas, cuyos yacimientos se han salvado aunque ha ardido su entorno.
“La falta de un PORN actualizado sitúa las decisiones de gestión en un limbo normativo, donde cada medida carece del respaldo que otorga un marco planificado y vigente”, analiza Fernández-Manso. Esto “genera incertidumbre administrativa y dificulta justificar actuaciones urgentes de restauración en lo ecológico y lo patrimonial, donde el paisaje cultural y arqueológico exige una intervención rápida y fundamentada”.
Las Médulas se distribuyen entre Carucedo (PSOE), Borrenes y Puente de Domingo Flórez (PP). Todas figuran en el Infocal (plan autonómico de gestión de incendios), así que por su alto riesgo de incendios deben disponer de un plan propio ante las llamas. Las estimaciones apuntan a que se han quemado unas 2.000 hectáreas del paraje protegido, dos tercios del total, sin que ningún pueblo tuviera esa normativa preparada. Solo Carucedo, según reveló elDiario.es, encargó en julio para recibirlo en diciembre un “plan técnico de prevención y lucha contra incendios forestales y catástrofes derivadas del cambio climático” si bien la Junta negó a la Unesco en 2022 que el cambio climático fuese “relevante” sobre Las Médulas. Fernández-Manso zanja: “Se incumplió el modelo normativo en lo autonómico y local y dejó a Las Médulas en vulnerabilidad extrema frente al fuego, una catástrofe patrimonial y natural”. La Fiscalía de Medio Ambiente, recuerda, estudiará esa falta de normativas locales.
El conjunto aún ardía cuando varios cargos del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) emitieron una tribuna alertando de que por los daños la Unesco podría “incluir Las Médulas en la lista de patrimonio en peligro, paso previo para su desclasificación si no se toman medidas urgentes”. “La recuperación debería regirse por las recomendaciones de la Unesco”, sugieren. Castilla y León ya ha anunciado que solicitará que se preserve esa categoría especial.
Javier Madrigal, especialista del CSIC en incendios, asegura que la Junta solo les ha contactado “para evaluar daños y no para saber por qué ha entrado el fuego, la gestión y la decisión final les corresponden, les remitiremos recomendaciones”. “El cambio climático y la gestión del territorio hacen que haya incendios de alta intensidad y parece que va a peor”, aprecia, pero hay que incluir más aspectos: “La clave es la autoprotección y gestión de la vegetación, hay que ponerse de acuerdo en qué se necesita, al ser un paraje protegido por la Unesco hay que ser muy cuidadoso”. Madrigal admite que sobre la zona patrimonial de las minas “hay que hacer casi cirugía vegetal o no hacer nada, pero sí una gestión adecuada del entorno”.