Hallado un cadáver semienterrado en Alicante, la tercera muerte violenta en la provincia en una semana
La Guardia Civil trata de averiguar la identidad del último fallecido y sigue investigando otro supuesto crimen en la misma localidad, Villajoyosa, y el tiroteo de un narcotraficante en Rojales
La Guardia Civil investiga este martes el hallazgo de un cadáver semienterrado bajo una capa de escombros en una especie de pozo, en realidad una arqueta de gran profundidad, en el municipio de Villajoyosa (Alicante, 36.093 habitantes). Según fuentes del instituto armado, el fallecido es un hombre, aunque aún se está a la espera de que se le practique la autopsia y sea plenamente identificado. Se trata del tercer cadáver encontrado en circunstancias anómalas en la provincia de Alicante en apenas una semana, después del de un varón de 33 años en una partida rural de la misma localidad, Villajoyosa, y el de otro varón, de 39 años, hallado en una vivienda de Rojales (municipio de 17.451 habitantes), ambos con signos de violencia. Las tres investigaciones siguen abiertas.
Las fuentes consultadas indican que el lunes por la tarde una llamada alertó a los servicios de emergencias del 112 de que había aparecido un cuerpo en un pozo de Villajoyosa, localidad turística cercana a Benidorm. Al lugar de los hechos se desplazó una brigada de la Policía Judicial de Altea, que confirmó la presencia del cadáver, del que apenas se veía alguna extremidad. A las labores de recuperación del cuerpo, que han terminado sobre las dos de la tarde de este martes, se unieron efectivos de los cuerpos especiales de rescate de montaña (GREIM) y subacuáticos (GEAS) de la Guardia Civil.
El periódico local Información señala que el fallecido podría ser un camarero marroquí de 25 años al que su familia busca desde hace más de una semana, y que la arqueta en la que alguien supuestamente trató de ocultar sus restos pertenece a una vivienda okupada. Sin embargo, los investigadores no pueden corroborar aún la identidad de la víctima ni las circunstancias de la muerte. Fuentes cercanas a la investigación sí señalan que la zona en la que se encontró el cadáver es un punto habitual de tráfico y consumo de drogas.
La investigación en curso se une a otra iniciada el pasado día 17, cuando otra llamada al 112 avisó de que había un cadáver en una zona rural y de difícil acceso de la partida de La Moratella, también en Villajoyosa. En esta ocasión, los agentes de la Guardia Civil desplazados sí pudieron identificar el cuerpo de un varón español de 33 años “con indicios de etiología violenta”, según fuentes oficiales. El caso recayó en el equipo de Homicidios de la Policía Judicial de Alicante, que informó al juzgado. Dadas las múltiples diferencias, tanto de localización como de circunstancias de abandono de los cuerpos, fuentes de la investigación no creen, en principio, que ambos casos estén conectados, aunque los dos permanecen bajo secreto de sumario.
Por último, el mismo día 17 un aviso ciudadano informó de la desaparición de un varón de 39 años cuyo cadáver fue hallado finalmente cerca de las dos de la madrugada del día siguiente en el municipio de Rojales, al sur de la provincia de Alicante y casi a cien kilómetros de distancia de los otros dos. El cuerpo fue localizado por una patrulla de la Guardia Civil de Almoradí en el exterior de un chalé de Ciudad Quesada, una enorme urbanización habitada principalmente por ciudadanos extranjeros. El secretario general de la Subdelegación de Gobierno de Alicante, José Antonio Cuadros, confirmó que el fallecido era de nacionalidad lituana, que presentaba varios impactos de arma de fuego y que tenía antecedentes por tráfico de drogas. Fuentes cercanas al caso aseguran que los primeros indicios parecen apuntar a que la víctima fue tiroteada después de intentar un vuelco, es decir, el robo de droga a otros narcos.