España y el Reino Unido relanzan en Bruselas las negociaciones por Gibraltar

Albares asegura que las negociaciones “avanzan” porque ve “voluntad política” de Londres y subraya que la pelota está en el campo británico para cerrar “aspectos muy precisos” aún pendientes

El ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares (derecha), se reúne con su nuevo homólogo británico, David Cameron, este martes en Bruselas.EXTERIORES EXTERIORES (EXTERIORES)
Bruselas -

España y el Reino Unido han relanzado este martes en Bruselas las negociaciones para lograr un tratado sobre Gibraltar, pendiente desde la entrada en vigor del Brexit; unas conversaciones que permanecían en suspenso desde finales de mayo, cuando se anunció el adelantamiento electoral en España. Confirmado ya el Gabinete de Pedro Sánchez, la idea ahora es acelerar las discusiones para hallar un acuerdo cuyas bases Madrid considera ya...

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España y el Reino Unido han relanzado este martes en Bruselas las negociaciones para lograr un tratado sobre Gibraltar, pendiente desde la entrada en vigor del Brexit; unas conversaciones que permanecían en suspenso desde finales de mayo, cuando se anunció el adelantamiento electoral en España. Confirmado ya el Gabinete de Pedro Sánchez, la idea ahora es acelerar las discusiones para hallar un acuerdo cuyas bases Madrid considera ya sentadas. Se está “muy cerca” de acordarlo todo y la pelota está en el tejado de Londres, ha subrayado el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, quien se ha mostrado satisfecho por el “avance” de las primeras discusiones directas con su par británico, David Cameron, si bien no ha querido avanzar un plazo concreto para anunciar un acuerdo.

“Hoy hemos avanzado porque David Cameron ha mostrado voluntad” para hacerlo, ha explicado Albares a periodistas tras su primer encuentro bilateral con el antiguo primer ministro británico, responsable originario de la actual situación, ya que fue él quien propuso un referéndum sobre la permanencia de Reino Unido en la UE que acabó provocando el Brexit (y su dimisión) y la necesidad, ahora, de resolver la situación de Gibraltar. Según Albares, en su reunión en Bruselas, en los márgenes de la cita de ministros de Exteriores de la OTAN y lejos de unas cámaras que Cameron ha rehuido durante toda la jornada, se han tratado ya “aspectos concretos” del acuerdo en en un ambiente distendido, “sin ninguna tirantez, ninguna disputa”.

La cita cara a cara, que ha sido además la primera visita oficial de Cameron a Bruselas desde la consumación del Brexit, fue acordada durante una primera conversación telefónica con el nuevo responsable diplomático del Reino Unido el lunes. Una llamada propiciada por el británico, otra muestra de que hay interés en cerrar el asunto por parte de Londres, considera el jefe de la diplomacia española, que durante la jornada ha insistido en que lo que “lo que necesita el acuerdo es voluntad política de avanzar” por la parte británica, y que esta ha estado presente.

La voluntad política española está ya “desde hace muchos meses” y Madrid no tiene “nada nuevo que añadir, ni se va añadir” a la propuesta “equilibrada y generosa” que ha hecho para alcanzar un acuerdo, había subrayado previamente Albares.

La propuesta oficial española, lanzada a finales de 2022, plantea que España pase “a controlar, en nombre de [el Espacio] Schengen, las fronteras exteriores de Gibraltar y que, para ello, pueda ejercer determinadas funciones y competencias, necesarias para proteger la integridad y seguridad del espacio”. Ello implicaría que, tras la supresión de la Verja, la frontera terrestre entre el territorio español y Gibraltar, sean agentes españoles —asistidos por Frontex al principio— los que controlen los pasos fronterizos del aeropuerto y el puerto de Gibraltar.

Sin querer entrar en detalles, alegando a lo delicado de las negociaciones, fuentes conocedoras de las conversaciones aseguran que la cuestión de la vigilancia de las fronteras es un “puente ya cruzado” y que ahora de lo que se trata es de encontrar una fórmula para que las dos partes se sientan “cómodas” con este y otros pocos puntos todavía en discusión.

“Estamos los dos focalizados en encontrar las fórmulas correctas para que las ideas políticas puedan concretarse en aspectos concretos que sean eficaces y que sean prácticos y que por fin pueda arrancar esa zona de prosperidad compartida”, ha dicho al respecto Albares.

“Las bases están muy claras, hace muchos meses puse sobre la mesa un acuerdo global, porque tiene que ser global y tocar todos los aspectos para crear esa verdadera zona de prosperidad compartida entre Gibraltar y el Campo de Gibraltar”, ha recalcado el ministro español, reiterando el mantra que lleva lanzando Madrid desde hace meses: “La pelota estaba y sigue estando en el tejado de Reino Unido, son ellos los que deben decidir si quieren un acuerdo o si prefieren que se aplique la legislación europea”, ha subrayado el jefe de la diplomacia española, quien ha reconocido que para Madrid la segunda opción sería un paso “descabellado”.

“Lo que es bueno para todo el mundo es ese acuerdo, y el espíritu que veo a Reino Unido es de alcanzar ese acuerdo”, ha insistido, a la par que se ha manifestado “confiado” en un acuerdo a la vista. “Sinceramente, confío en que, dado que ya estamos tratando aspectos muy precisos y muy puntuales, porque en la mayor parte del acuerdo ya estamos de acuerdo, podamos llegar a un punto definitivo y global de ese acuerdo”, ha dicho. No obstante, nadie se atreve aún a fijar una fecha para ello, pese a lo que flota en el aire una urgencia para resolver una cuestión que todavía tendrá que validar una Comisión Europea que deberá renovarse en menos de un año, tras las elecciones europeas de junio.

Pese a lo “cerca” que están las partes para cerrar los pocos “flecos” restantes, nadie se atreve aún a dar por sentado ningún pacto. Albares ha usado para ello un dicho diplomático: “Nada estará acordado hasta que esté todo acordado, hasta la última coma”, ha reconocido.

Crisis con Israel

En otro orden, Albares ha dado por finalizada la crisis diplomática con Israel, tras la convocatoria el lunes a la embajadora de Israel en Madrid, Rodica Radian-Gordon, después de las autoridades israelíes acusaran a Sánchez y el primer ministro belga, Alexander De Croo, de “apoyar el terrorismo”, extremo que España considera “falso”.

“Lo que ha quedado muy claro es que no deben de producirse nunca más ni hacia el presidente del Gobierno ni hacia ningún miembro del Gobierno declaraciones falsas que son totalmente inaceptables (...) No vamos a aceptar ninguna declaración más de este tipo (...) ha quedado suficientemente clarificado que no se van a tolerar más declaraciones en ese sentido”, ha zanjado el jefe de la diplomacia española.

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