Un muerto en Navarra tras incendiarse un dispositivo electrónico que cargaba junto a la cama donde dormía

Kevin Paredes Jiménez, de 25 años, murió el domingo a primera hora de la noche en Bera (Navarra) como consecuencia de las heridas sufridas por la explosión e incendio de un dispositivo electrónico que tenía cargando en la mesilla de noche, muy próxima a la cama en la que dormía. Las primeras investigaciones realizadas por la Guardia Civil han descartado que el estallido del teléfono móvil de la víctima haya sido la causa del fuego que afectó al cabecero y al colchón en el que descansaba y que le produjo quemaduras graves de las que no ha podido recuperarse. Agentes de Policía Judicial de la Gu...

Kevin Paredes Jiménez, de 25 años, murió el domingo a primera hora de la noche en Bera (Navarra) como consecuencia de las heridas sufridas por la explosión e incendio de un dispositivo electrónico que tenía cargando en la mesilla de noche, muy próxima a la cama en la que dormía. Las primeras investigaciones realizadas por la Guardia Civil han descartado que el estallido del teléfono móvil de la víctima haya sido la causa del fuego que afectó al cabecero y al colchón en el que descansaba y que le produjo quemaduras graves de las que no ha podido recuperarse. Agentes de Policía Judicial de la Guardia Civil de la Comunidad foral investigan qué pudo provocar el accidente doméstico en el que perdió la vida el hombre, oriundo de Ecuador.

La explosión se produjo el domingo al mediodía en la habitación de la víctima. Los vecinos del bloque de viviendas en el que residía junto a su madre fueron quienes alertaron a la Guardia Civil de lo sucedido. En un primer momento, los agentes aplicaron maniobras de reanimación al varón, muy afectado por las quemaduras y el humo. La víctima fue trasladada en un helicóptero medicalizado al Hospital de Cruces (Bizkaia), donde ingresó con pronóstico muy grave en la Unidad de Quemados. La Guardia Civil confirmó la muerte pasadas las 21.30 del domingo.

En un primer momento, el cuerpo policial informó de que el dispositivo que había estallado era el teléfono móvil de la víctima. No obstante, tras realizar una primera inspección, los agentes han confirmado que las llamas se han originado por la explosión de un dispositivo electrónico que estaba enchufado a la corriente eléctrica, aunque no han podido precisar de qué tipo, ya que había quedado destruido e irreconocible a simple vista como consecuencia de la acción del fuego.

Lo que sí han descartado los investigadores tras la primera inspección ocular es que se tratara del teléfono móvil, puesto que este se ha encontrado en el suelo de la vivienda sin signos de explosión ni ignición. El humo denso generado por el fuego hizo necesaria la intervención de los bomberos de Navarra.