Dos detenidos por las muertes violentas en Málaga y Sevilla de la noche de Halloween

Dos personas han sido detenidas por las muertes violentas ocurridas en Málaga y en Palomares del Río (Sevilla) en la noche del lunes al martes, día en el que numerosas personas salieron a las calles para celebrar Halloween. Los servicios de emergencia de Andalucía recibieron alrededor de 3.000 llamadas, convirtiendo la de Todos los Santos en una de las vigilias más movidas del año en la comunidad, según datos del Gobierno andaluz.

La muerte más temprana ocurrió ...

Dos personas han sido detenidas por las muertes violentas ocurridas en Málaga y en Palomares del Río (Sevilla) en la noche del lunes al martes, día en el que numerosas personas salieron a las calles para celebrar Halloween. Los servicios de emergencia de Andalucía recibieron alrededor de 3.000 llamadas, convirtiendo la de Todos los Santos en una de las vigilias más movidas del año en la comunidad, según datos del Gobierno andaluz.

La muerte más temprana ocurrió la noche del 31 de octubre en la barriada malagueña de La Corta. La Policía Nacional ha detenido a un joven de 21 años por su implicación en el tiroteo que causó la muerte de otro hombre de 28 años. El presunto autor de los disparos ha sido arrestado este miércoles por la mañana, según fuentes policiales. La reyerta se debió a unas rencillas previas entre residentes de la zona, según fuentes cercanas de la investigación citadas por Efe. El diario local SUR asegura que el arrestado es primo de la víctima. El fallecido tenía cinco impactos de bala, dos en la cabeza y el resto en el tronco y en una axila, según los resultados preliminares de la autopsia. Este es el tercer incidente con armas de fuego producido en la provincia malagueña durante las dos últimas semanas.

La Guardia Civil ha informado este miércoles de la detención de un menor de 16 años relacionado con la muerte a puñaladas de un joven de 18 años en Palomares del Río. Fuentes cercanas a la investigación aseguran que las pesquisas siguen abiertas y que podría haber más arrestos.

El fallecido, Jesús R., murió en la puerta de su casa tras recibir varios golpes y, al menos, una puñalada. Venía de celebrar Halloween en Sevilla y había tomado el último metro desde la capital andaluza. Antes de llegar a su domicilio, llamó a su hermano de 16 años que estaba en un parque cercano para pedirle las llaves. En ese trayecto se encontró con sus agresores y perdió la vida. A las 3.45 de este martes, una persona alertaba al 112 de que había un varón inconsciente en la calle. Cuando llegó la Guardia Civil y los servicios de emergencia lo encontraron muerto. A escasos metros de donde yacía su cadáver se halló una porra extensible.

La detención del joven presuntamente vinculado con el homicidio se ha realizado en Coria del Río. En las últimas horas, había cobrado fuerza la hipótesis de que el fallecido se había topado por causalidad, y mala suerte, con un grupo de personas que estaba tratando de robar en una vivienda cercana o que presenció que hacían algo sospechoso y en represalia fue agredido hasta la muerte. La Guardia Civil no confirma esta línea de investigación, ni descarta otros supuestos.

Libertad para los 11 menores arrestados por robo con violencia y lesiones

Once de los 18 menores que también fueron detenidos por la Policía Nacional la noche de Todos los Santos por agredir a otros chavales en el barrio sevillano de Los Remedios han quedado en libertad tras pasar a disposición judicial, según han confirmado a este diario fuentes del Ministerio Público. Los otros siete fueron puestos en libertad el martes por la tarde. Todos están siendo investigados por delitos de robo con violencia y lesiones, pero no se han adoptado contra ellos ningún tipo de medida cautelar, si bien no se descarta que se tome alguna, conforme avance la investigación. Como resultado de las agresiones que cometieron la noche del 31 de octubre a eso de las 23.30, siete menores resultaron heridos y dos de ellos necesitaron asistencia hospitalaria.

No es la primera vez que este grupo ―que actúa siempre vestido con ropa negra― se dedica a amedrentar y atacar a otros jóvenes de esa zona, uno de los barrios más acomodados de Sevilla, pero esa noche fueron mucho más agresivos y eran más numerosos de lo habitual. “Van a la caza del pijo”, explicaba a este diario Luis María Suárez, un vecino que presenció varias de las persecuciones de algunos de los detenidos a otros chavales en la noche del 1 de noviembre. “Normalmente, vienen con navajas, pero ese día llevaban machetes, bates de béisbol”, explica.

Los padres y vecinos afectados del barrio estudian presentar una denuncia colectiva ante el Ayuntamiento de Sevilla, para solicitar más protección en el barrio y un control en la zona de las botellonas. Como primera medida han iniciado una recogida de firmas, tal y como confirma Suárez.

Antonio Crespo, portavoz del Sindicato Unificado de Policía de Sevilla, advierte de que cada vez es más habitual encontrar a menores con navajas en los controles que realizan en las zonas de ocio. “No hacen uso de ellas, pero las llevan”, explica. Fuentes cercanas a la investigación de los incidentes en Los Remedios explican que se está indagando si este grupo de jóvenes —que son de barrios de Sevilla y de municipios cercanos a la capital andaluza― puede ser el germen de alguna banda similar a las que ya existen en Madrid y Barcelona, aunque alertan de que en Sevilla no existe un problema semejante.

Por otro lado, la Fiscalía de Menores ha decretado el ingreso en un centro de internamiento de un chico de 16 años acusado de causar la muerte de otro de 17 en una pelea ocurrida el pasado domingo en la localidad de Bedmar (Jaén). Se le acusa de un presunto delito de lesiones sobre el joven Abdel ―de nacionalidad marroquí, aunque residente en Bedmar― al que habría golpeado con un solo puño y provocado lesiones muy graves. La víctima fue ingresada en el Hospital Neurotraumatológico de Jaén y falleció el lunes. El martes, centenares de vecinos se concentraron ante el Ayuntamiento de Bedmar y Garciez como señal de repulsa por la muerte del joven marroquí y para mostrar su rechazo a cualquier tipo de violencia. A la concentración asistieron los familiares del joven Abdel, cuyos restos mortales están a la espera de poder repatriados a su país de origen.