Los principales cambios de la nueva ley de tráfico: seis puntos por usar el móvil y cursos para recuperarlos
La nueva normativa aprobada este jueves afecta a las clases ‘online’ de las autoescuelas, las sanciones por puntos o el límite de velocidad para adelantamientos
El Congreso de los Diputados ha aprobado este jueves una nueva reforma de la ley de tráfico con 190 votos a favor, 139 abstenciones y ninguno en contra de los 329 diputados presentes. Entrará en vigor tres meses después de que se publique en el Boletín Oficial del Estado. El texto revisa las infracciones que implican pérdida de puntos en el carné de conducir, prohíbe rebasar el límite de velocidad en adelantamientos de carretera...
El Congreso de los Diputados ha aprobado este jueves una nueva reforma de la ley de tráfico con 190 votos a favor, 139 abstenciones y ninguno en contra de los 329 diputados presentes. Entrará en vigor tres meses después de que se publique en el Boletín Oficial del Estado. El texto revisa las infracciones que implican pérdida de puntos en el carné de conducir, prohíbe rebasar el límite de velocidad en adelantamientos de carreteras convencionales y establece la tasa de alcohol cero para los menores de edad, entre otros asuntos.
La nueva norma finalmente no permitirá, tras las enmiendas aprobadas en el Senado, la existencia de autoescuelas exclusivamente online y obliga a estas a que dispongan de un “local” o “establecimiento físico”. Se impone así la petición de las asociaciones de autoescuelas como CNAE, que advertían de una posible “competencia desleal” entre centros si se permitía que estos fueran 100% virtuales sin necesidad de sede, aunque las clases teóricas podrán ser “a distancia”, según establece la normativa.
El texto final también elimina la posibilidad de exceder el límite genérico de velocidad para adelantar en carreteras convencionales, donde el máximo es de 90 kilómetros por hora. Antes de esta medida estaba permitido superar el límite hasta un máximo de 20 kilómetros por hora, es decir, hasta alcanzar los 110 kilómetros por hora. Esta ha sido una de las medidas más atacadas por el Partido Popular y Vox en el debate —previo a la votación— que se ha producido esta mañana en el Congreso de los Diputados. “La enmienda aumenta el riesgo de tener un siniestro grave porque se aumenta el tiempo que se tarda en hacer el adelantamiento”, ha afirmado el Óscar Gamazo, diputado popular.
El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, aseguró, durante el debate de la reforma, que ha obedecido a dos principios para “entrar más aún en el siglo XXI″: “Incluso el conductor más diligente puede cometer una imprudencia por mínima que sea (...) Todos nosotros somos cuerpos frágiles y el menor impacto puede tener consecuencias importantes”, ha concluido el ministro.
La normativa afectará directamente a las sanciones en el carné por puntos. La penalización por el uso del móvil al volante pasa de cuatro a seis puntos. El uso incorrecto del casco, el cinturón de seguridad y los sistemas de retención infantil descontará cuatro puntos (antes tres). Además, se unifica el periodo necesario sin cometer infracciones para recuperar el saldo inicial —los 12 puntos del carné— que pasará a ser de dos años en sanciones graves y muy graves. Antes, en el caso de estas últimas, se podía tardar hasta tres años. La ley también incluye una nueva forma de recuperar puntos. Los conductores que realicen “cursos de conducción segura” serán bonificados con dos puntos extra en su carné de conducir, hasta un máximo de 15. Esta novedad queda pendiente hasta que “entre en vigor” la orden con las condiciones de dichos cursos.
Asimismo, se endurecen las penas por copiar en los exámenes teóricos y cometer cualquier fraude. El texto señala el uso del teléfono móvil como el medio más común para ello. Su uso en los exámenes se penará con 500 euros de multa más la imposibilidad de presentarse de nuevo al test durante los seis meses siguientes. Además, para los menores de 18 años, la reforma prohíbe cualquier nivel de alcohol en sangre o en aire espirado.
Será considerada infracción “muy grave” llevar en el coche —aunque no estén activados— “inhibidores de radares y cinemómetros” (que miden la velocidad del vehículo) y “mecanismos de detección de radares”. No se trata de aquellos sistemas que avisan de la posición de un radar —como Google Maps, Waze o cualquier GPS— sino de aquellos sistemas detectores de radares e inhibidores de la señal. Además, introduce novedades para los patinetes eléctricos: será obligatorio el uso del casco durante su conducción y no podrán circular por la acera, al igual que los vehículos de movilidad personal, incluyendo bicicletas y ciclos, que también lo tendrán prohibido.