Crítica:DORMIR

'Trufiturismo'

LA TRUFA NEGRA, complejo urbano contemporáneo en Mora de Rubielos

Una de las iniciativas que demuestran la existencia de Teruel, y de la sierra de Gúdar, aúna el diseño, la gastronomía, el bienestar termal y el turismo. Sus promotores no quieren reconocerse como hoteleros, ni que La Trufa Negra se denomine hotel, sino más bien un complejo con habitaciones, apartamentos, masía para banquetes, spa y un restaurante especializado en la gastronomía de la trufa. O lo que es igual, un emprendimiento de trufiturismo, como indican en su blog.

Casi al borde del río Mora, coronado en alero de madera y teja, sorprende tanto desparpajo estilístico a ...

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Una de las iniciativas que demuestran la existencia de Teruel, y de la sierra de Gúdar, aúna el diseño, la gastronomía, el bienestar termal y el turismo. Sus promotores no quieren reconocerse como hoteleros, ni que La Trufa Negra se denomine hotel, sino más bien un complejo con habitaciones, apartamentos, masía para banquetes, spa y un restaurante especializado en la gastronomía de la trufa. O lo que es igual, un emprendimiento de trufiturismo, como indican en su blog.

Casi al borde del río Mora, coronado en alero de madera y teja, sorprende tanto desparpajo estilístico a un lado de la carretera que atraviesa Mora de Rubielos. Si la fachada confunde -cae en el falso pintoresquismo de muchas arquitecturas que quieren ser de montaña-, sus interiores pasan por ser funcionales, neutros, como los de cualquier hotel urbano contemporáneo. Y en algunas zonas, efectistas, como se reclama a sí misma la arquitectura del turismo experiencial. Hay cierta sofisticación en los materiales, así como en la elección de las texturas. Y en el mobiliario: plasmas colgados, butaquitas de revista, cristales tintados, bordes y superficies retroiluminados... Poco habitual en alojamientos de montaña.

LA TRUFA NEGRA

PUNTUACIÓN: 6

Categoría: tres estrellas.

Dirección: avenida de Ibáñez Martín, 10-14. Mora de Rubielos (Teruel).

Teléfono: 978 80 71 44.

Fax: 978 80 71 43.

Internet: www.latrufanegra.com.

Instalaciones: guardaesquís, salas de reuniones para 165 personas, spa, salón, cafetería, comedor.

Habitaciones: 34 dobles y 5 júnior suites.

Servicios: tres habitaciones adaptadas para discapacitados, no admite animales.

Precios: desde 89 euros la habitación doble, IVA incluido; desayuno: 12 euros, IVA incluido.

En invierno, el complejo aposenta a los esquiadores que viven su pasión en la cercana estación de Javalambre. En todo tiempo se puede descubrir el mundo de la recolecta de la trufa con perros adiestrados en la masía de 50 hectáreas vinculada al complejo (salida todos los sábados del año). La cosecha se paladea después en el restaurante del hotel, Melanosporum, en honor de la trufa (Tuber melanosporum) de Teruel. Lástima que el desayuno no proporcione la misma satisfacción.

Los sedentarios pueden ocuparse en la zona ciberapañada de la cuarta planta, donde mal que bien comparten espacio una biblioteca y una sala de juegos para niños. O en el spa.

De noche, los colores interiores se vuelven más titilantes. En las habitaciones predominan los tonos neutros, la iluminación focal halógena y una decoración básica de cuadritos verticales y espejos rectangulares. Una pequeña mesa de trabajo disputa el espacio a un pesado estor veneciano incomprensiblemente instalado detrás de una cortina. Algo incómoda resulta la ducha, dentro de la bañera. Eso sí, los colchones son cómodos y de buen apresto. En las del piso superior, abuhardilladas, hay un buen sofá para repantingarse y escuchar los sonidos olvidados del silencio.

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Habitación del hotel La Trufa Negra, en Mora de Rubielos (Teruel).
'Spa' del hotel La Trufa Negra, en Mora de Rubielos (Teruel).

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