Ciudadanos, ¡a votar!

Esta grave crisis democrática es en realidad una gran oportunidad. Los partidos políticos deben garantizar que permanecerán dentro del marco de la Constitución. Si institucionalmente no hay jura o promesa a esta, debe en cualquier caso quedar claro que todo partido, independientemente de su ideología, que quiera participar en nuestra sociedad, está obligado a jugar sus cartas respetando nuestras leyes, las democráticas, las de la Constitución española. La jura o promesa se realiza en el momento que se dirigen a los ciudadanos ofreciéndoles sus servicios. Ética y moralmente el incumplimiento de...

Esta grave crisis democrática es en realidad una gran oportunidad. Los partidos políticos deben garantizar que permanecerán dentro del marco de la Constitución. Si institucionalmente no hay jura o promesa a esta, debe en cualquier caso quedar claro que todo partido, independientemente de su ideología, que quiera participar en nuestra sociedad, está obligado a jugar sus cartas respetando nuestras leyes, las democráticas, las de la Constitución española. La jura o promesa se realiza en el momento que se dirigen a los ciudadanos ofreciéndoles sus servicios. Ética y moralmente el incumplimiento de este acto deja intuir ya las intenciones que se pueden esconder detrás. Ningún país que no trabaje para el bienestar de sus ciudadanos puede prosperar. Los votantes tenemos en nuestras manos el futuro íntegro de nuestra nación. Elegir nunca ha tenido tanta importancia, porque si antes sólo lo intuíamos, ahora nos ha quedado claro. Ciudadanos, ¡a votar!— Cristina Sande Cecchi. Zaragoza.