Enrique de Inglaterra se desvía 3.000 kilómetros de su destino para ver a su novia

Antes de volver a Londres, tras su viaje oficial por el Caribe, el príncipe decidió viajar un día a Canadá para encontrarse con Meghan Markle

El príncipe Harry, el último día de su viaje oficial por el Caribe.Chris Jackson (Getty Images)

Los movimientos de Enrique de Inglaterra siempre han sido escrutados, pero desde que este confirmara su noviazgo con Meghan Markle los medios de comunicación no se pierden detalle de los desplazamientos del príncipe. Ahora, varios medios británicos informan de que, tras el viaje oficial del nieto de la reina Isabell II por el Caribe, Enrique decidió desviar su vuelta unos 3.000 kilómetros —y unas seis horas de vuelo— para ir...

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Los movimientos de Enrique de Inglaterra siempre han sido escrutados, pero desde que este confirmara su noviazgo con Meghan Markle los medios de comunicación no se pierden detalle de los desplazamientos del príncipe. Ahora, varios medios británicos informan de que, tras el viaje oficial del nieto de la reina Isabell II por el Caribe, Enrique decidió desviar su vuelta unos 3.000 kilómetros —y unas seis horas de vuelo— para ir al encuentro de la actriz en Canadá.

El hijo menor de la fallecida Lady Di, de cuya muerte se cumple el 20 aniversario el año que viene, ha actuado como representante de su abuela durante su visita de casi dos semanas por siete países del Caribe, donde ha acudido para celebrar el 35º aniversario de la independencia de Antigua y Barbuda y el 50º de Barbados y Guyana. Tras sus compromisos oficiales, el joven príncipe, de 32 años, debía regresar desde Barbados —donde coincidió con la cantante Rihanna— hasta Londres, el pasado domingo. En lugar de regresar hacia Europa, Enrique de Inglaterra se plantó en Toronto, donde Markle ha terminado el rodaje de la sexta temporada de la serie Suits, para pasar en la ciudad canadiense 24 horas. Este miércoles debía estar en su país para seguir con sus compromisos reales.

“Harry no podía esperar. Tenía que volar de vuelta a Londres con el resto de su séquito, pero cambió de idea y se desvió para verla directamente, ya que no podían estar separados”, ha contado una fuente cercana al tabloide británico The Sun.

Enrique de Inglaterra ya dio muestras de la importancia que tiene Meghan Markle, una actriz estadounidense divorciada de 35 años, en su vida cuando a principios de noviembre emitió un inusual comunicado para pedir respeto y privacidad. En la nota oficial publicada por el palacio de Kensington, se refería a ella como “su novia”, algo poco habitual en las casas reales europeas, ya que no confirman los noviazgos hasta que no hay fecha de boda. Lo que todavía no se ha producido es una aparición oficial de la nueva pareja. Los medios sí fotografiaron a la intérprete hace tres semanas en Londres, en los alrededores del palacio de Kensington, residencia oficial de Enrique de Inglaterra.

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