Todos preocupados por Iker

Ni soy madridista, ni soy del Barcelona, soy de mis hijos que juegan al fútbol en el parque y en un equipo del barrio. Observo, atónita, cómo a todos nos tiene preocupados el tema del portero del Real Madrid.

 A los niños, porque es un ídolo (a ver qué hago yo ahora con la camiseta de 70 euros); a las mujeres, porque va a ser padre; a los hombres, porque creen que la culpa es de Sara Carbonero; a las madres, por si le duele algo al chico; a los directivos del Real Madrid, porque pensemos que todo se debe a la actitud “subversiva” del portero; y también a algún jugador del Barcelona, por...

Ni soy madridista, ni soy del Barcelona, soy de mis hijos que juegan al fútbol en el parque y en un equipo del barrio. Observo, atónita, cómo a todos nos tiene preocupados el tema del portero del Real Madrid.

 A los niños, porque es un ídolo (a ver qué hago yo ahora con la camiseta de 70 euros); a las mujeres, porque va a ser padre; a los hombres, porque creen que la culpa es de Sara Carbonero; a las madres, por si le duele algo al chico; a los directivos del Real Madrid, porque pensemos que todo se debe a la actitud “subversiva” del portero; y también a algún jugador del Barcelona, por ser su amigo. A Diego López, porque no entiende nada; a Vicente del Bosque, porque es muy sabio; al Príncipe de Asturias, porque tiene su premio; al pueblo de Móstoles y a todos los españoles, porque le agradecemos los buenos momentos que nos ha dado. El caso es que a todos nos preocupa Casillas. Un “sinvivir” nacional.

Lo interesante es que con este tema nos vamos olvidando de los verdaderos problemas del país. Un respiro.

Menos mal que falta poco para el Mundial.— Mª Victoria Santos Díaz.