Blogs / El Viajero
El blog de viajes
Por Paco Nadal

En Uzbekistán

Anoche, el tren en el que recorro la ruta de la Seda cruzó la primera frontera y hoy he amanecido en otro país: Uzbekistán. Y de repente, todo parece haberse hecho más luminoso y feliz. En comparación con el estado policial que es ...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Anoche, el tren en el que recorro la ruta de la Seda cruzó la primera frontera y hoy he amanecido en otro país: Uzbekistán. Y de repente, todo parece haberse hecho más luminoso y feliz. En comparación con el estado policial que es Turkmenistán , donde hay más tipos con uniforme en cada esquina que en una reunión del G-20, llegar a Uzbekistán es como llegar a una fiesta. Los turkmenos que he conocido eran gente encantadora, desde luego, pero el carácter que imprimen al país sus autoridades tiene un tufillo estalinista que mola muy poco.

Sin embargo en Uzbekistán hay vida real en las calles. Hay niños que juegan, perros y gatos, mercados y bazares, señoras que ríen, hombres que sestean a la sombra, ruidos, moscas, charcos de aguas sucias, calles sin asfaltar, ciber-cafés, restaurantes populares a la orilla de un lago? y una gran amabilidad hacia el extranjero. He pasado una hora con una amable señora empeñada en explicarme todos los sombreros que se utilizan en este país (hay uno para casi cada hora del día, cada actividad social o religiosa y cada región geográfica). Cuando llevaba una docena le he dicho que ?spasibo, tovarich?, que ya tenía suficiente información, que solo quería tomar unas notas y no montar una sombrerería en Madrid. Pero muy digna me ha dicho que volviera a sentarme, que todavía le quedaba otra docena por explicarme .

La mayor parte del territorio uzbeko es también un puro desierto. El país tiene una excesiva dependencia del monocultivo del algodón y mucho menos gas en su subsuelo que su vecino Turkmekistán. Pero los dioses quisieron que quedara dentro de sus fronteras el Trío de Ases, las tres ciudades más gloriosas, bellas y bien conservadas de todo el Asia Central y de la ruta de la Seda: Bukhara, Khiva y Samarcanda.

Desde la primera de ellas, viendo desde la ventana del hotel un mar de cúpulas de tejas vidriadas, escribo estas líneas.

Comentarios

Es así?? como esa foto???? parece el sueño de un cuento.........................Besos
¡Por fin llegaste a un país de nombre mas o menos normal! Porque Turkmekistán no había con que fumarlo (. ansío a que llegues a kazakisstán que es más facil todavía) y estas imágenes también son màs amablesPD: ¡No sabés lo identificada que me siento con la señora de los sombreros! Es que vos debés ser un tío de cosicas cortas: te deben gustar las conversaciones cortas, los mails cortos, y eso no puede ser...pobre de nosotras
Me acuerdo del post de "Viajealasantipodas"... bello.Esta cupulas de tejas vidriadas deben ser todo un espectaculo al atardecer. Disfrutalo por nosotros, amigo.Besos
Cuando tú llegues a Samarcanda la muerte perderá su dominio, seguro...Buff, como me gustaría estar mirando eso en realidad. Que lo disfrute usted Todo. Diría la señora de los sombreros, que por cierto, parecía de Santander.
Paco, pregunta rara ¿que lleva un tipo como tu en la maleta para un viaje a samarcanda? y no es una pregunta filosofica
¿Vas a pasar lor las otras dos también? [8|]
Gracias por descubrirnos y describirnos estas maravillas!! Ansío que llegues ya a Samarcanda..
Hola de nuevo Paco, sin duda estás en el meollo de lo que tanto se ha dado a conocer como la ruta de la seda. Yo creo que es mucho más que una simple ruta, pero sin duda es un lugar muy especial y que vale la pena disfrutar cond etenimiento. En mi visita a Bukhara, hace dos años, empezó mi tortura centroasiática, o como yo la llamé, mi "ruta del papel higiénico"..., así que ten cuidado con lo que te zampas. http://lacomunidad.elpais.com/viajealasantipodas/category/uzbekistanLOs sompreros no te harán ningún daño, eso es seguro.UN abrazo desde occidente
Eso son topónimos lindos y sugerentes...vaya que sí. Espera, que me monto en la alfombra mágica y planeo en alguno de los tejados azules. Oye, dime que no, dime que no es cierto, que te pusiste a divagar sobre sombreros en ruso?????????? pues nasdarovia! -qué se bebe con los uzbekos?
PD: Vos que sos tan majo...¿No podés hacer algo para que Blas no me moleste? Pero que parezca un accidente ¿Eh?
Bellísima imagen. Me alegro de que Uzbekistán sea más "humana".Buen viaje a las otras dos maravillas.
Hola PacoEste verano estuvimos en Uzbekistan y me pareció precioso, con una vitalidad envidiable, la luz es más que brillante, la gente amabilísima y el ambiente de los bazares mágico. Ha sido un gran descubrimiento a nivel turístico ya que no nos esperábamos ver la belleza de esas 3 ciudades. Nos los organizó todo una empresa de Barcelona que trabaja con una empresa local.Una advertencia, no bebais agua del grifo, ni para lavarse los dientes y cuidado con las ensaladas.
Maravilloso (redondamente)! ... Me alegro por la equidad de los Dioses.Saludos
Hombre, pues si Uzbekistán no es un estado policial que venga Dios (o Alá o quien sea) y lo vea. Islam Kadirov es un sádico represor.
Parece que va mejorando el panorama, las ciudades se van humanizando y te vas acercando a Samarkanda. Espero que estés disfrutando enormemente de tu viaje. Las vistas desde el hotel, tienen que ser maravillosas. Sigo haciendo la ruta de la Seda... BesosEstrella
Bienvenidos a la fabulosa dictadura "democrática" de Uzbekistan, Donde los turistas no son más que ganado al que timar y al que sacar un dinero que terminará en las arcas de la familia en el poder desde hace más de 20 años.Un patrimonio histórico más propio de Disneylandia, donde todo ha sido reconstruido y reinventado para aprovecharse de la credulidad de la clase turista. Pero a esos viajeros bobalicones no les importará nada de todo esto mientras tengan la ilusión que están viviendo algo único. Samarcanda, ciudad que como Tombuctú, hace soñar a las generaciones de viajeros, no es hoy en día más que un vil reclamo al servicio de la industria del turismo. No hay derecho que se trate a aquellos que viajan como a borregos.
Sobre el comentario de que el trato dado como borregos , no lo entiendo . Son gente amable y un oais seguro.Creo que no has viajado en tu vida y que lo único que debes de hacer es ir a la playa a bailar los pajaritos
Estuve en Uzbekistán hace un par de años y me sorprendió lo cálida que es la gente, me los esperaba mucho más fríos. Las ciudades son maravillosas y la visita a Moynaq para ver la terrible destrucción del mar de Aral, impresionante.

Boletín

Las mejores recomendaciones para viajar, cada semana en tu bandeja de entrada
RECÍBELAS

Archivado En