¿Ha llegado el momento de cazar gangas en Bolsa? Cuidado, los precios pueden caer aún más
La crisis del coronavirus ha abaratado la compra de acciones, pero la cautela se impone en un mercado incierto
La Bolsa acumula varias semanas de infarto. Una crisis sanitaria que parecía en un primer momento acotada al territorio chino se ha convertido en una epidemia global. Hay demasiadas incertidumbres como para cuantificar con exactitud el impacto del coronavirus, pero las Bolsas, que suelen ser un indicador económico adelantado, ya descuentan un escenario negativo. Desde que el 21 de febrero, día en el que se conocieron los primeros casos de infectados en Italia, el Ibex 35 pierde un 15,44% y la p...
La Bolsa acumula varias semanas de infarto. Una crisis sanitaria que parecía en un primer momento acotada al territorio chino se ha convertido en una epidemia global. Hay demasiadas incertidumbres como para cuantificar con exactitud el impacto del coronavirus, pero las Bolsas, que suelen ser un indicador económico adelantado, ya descuentan un escenario negativo. Desde que el 21 de febrero, día en el que se conocieron los primeros casos de infectados en Italia, el Ibex 35 pierde un 15,44% y la pérdida de capitalización para las compañías que conforman el índice es de 97.413 millones.
Muchos inversores se estarán preguntando si lo peor desde el punto de vista financiero ya ha pasado y si los actuales niveles de los índices son una clara señal de compra con el fin de pescar gangas tras el fuerte castigo que han sufrido casi todas las compañías. Casas de Bolsa, bancos de inversión y gestoras de fondos tratan de despejar esa incógnita. Aunque las recomendaciones no son unánimes: los hay que insisten en la cautela y otros que sugieren lanzarse a la búsqueda de gangas.
David Lafferty, jefe de estrategia de Natixis, considera que la volatilidad permanecerá en los mercados y recomienda a los inversores “no malgastar la crisis”. “La elevada volatilidad es una gran oportunidad para reequilibrar [las carteras], optimizar las consideraciones fiscales y emprender una reasignación de activos”, añade. El experto de Natixis recuerda que con las caídas la renta variable está menos cara, “pero no barata”, ya que sigue cotizando con prima respecto a sus valoraciones históricas. “Además, las previsiones de beneficios por parte de las compañías son demasiado optimistas. Puede que la contención de la enfermedad, junto con las medidas monetarias, hagan que los títulos suban a corto plazo, pero los altos múltiplos a los que cotizan son un lastre para un rebote más sostenido”, añade Lafferty.
Este mensaje de prudencia también lo sostiene Benjamin Melman, responsable global de inversiones en Edmond de Rothschild AM: “Las valoraciones del mercado eran bastante altas antes de que el virus se propagara más allá de Asia. Desde entonces, han disminuido drásticamente, pero los descuentos no son aún lo suficientemente atractivos como para justificar una posible compra, independientemente de las incertidumbres sobre el impacto del virus”. Melman sí reconoce que la Bolsa, en términos de riesgo, ha caído mucho más que los bonos.
En cambio, desde Diaphanum sugieren incrementar la exposición a activos de riesgo en las carteras, sobre todo con acciones estadounidenses y europeas. “Esta situación afectará negativamente al crecimiento mundial y a los resultados de las empresas, con una bajada de actividad muy rápida, pero que tendrá una reacción igualmente rápida, y que se está reflejando en los mercados: los precios han caído y es muy probable que también se descuente rápidamente la subida, por lo que es importante actuar con celeridad”, indican desde esta sociedad de valores.
Críticas a la Fed
La Reserva Federal de EE UU (Fed) se convirtió el pasado martes en el primer gran banco central en reaccionar a la crisis del coronavirus. Y lo hizo de una forma muy agresiva al bajar los tipos de interés en medio punto. Sin embargo, la decisión del organismo dirigido por Jerome Powell no ha sido bien recibida por muchos analistas. Julius Baer ve “cierto pánico” en la decisión y subraya: “Hace falta preguntarse si la Fed sabe algo que nadie más sabe”, al tiempo que considera que, con este recorte, “la Fed está consiguiendo lo contrario de lo que se proponía, que era aliviar las preocupaciones sobre el crecimiento y tranquilizar a los mercados”. Pese a todo, Julius Baer sigue considerando que la crisis del coronavirus será de “corta duración”: “Causará un daño severo en el primer semestre, pero éste dará paso a una fuerte recuperación en el segundo” y mantiene una visión positiva sobre valores “financieros, cíclicos y tecnológicos”.
Para el responsable de renta fija de Janus Henderson, Jim Cielinski, la decisión de la Fed no eliminará la volatilidad. “Los mercados van a seguir moviendo en función de los datos sobre infectados por el virus. Esos movimientos van a propiciar oportunidades para los gestores activos, ya que habrá valores que queden muy sobrevendidos y otros demasiado caros”, añade Cielinski.