Los investigadores europeos del apagón denuncian que aún faltan datos de las empresas
El informe presentado este viernes por ENTSO-E en Bruselas desvela que el proceso de recopilación de información de terceros ha sido “complejo y desafiante”. Asegura que ocho empresas no dieron su consentimiento a dar su información
Los expertos europeos que lideran la investigación sobre lo que pasó el 28 de abril han encontrado ciertas dificultades para recabar toda la información de ese día. Los investigadores han podido recoger “muchos datos”, pero “aún faltan algunos datos, en particular los relacionados con algunas de las desconexiones de generación que se produjeron antes del apagón”, expone el primer informe que han p...
Los expertos europeos que lideran la investigación sobre lo que pasó el 28 de abril han encontrado ciertas dificultades para recabar toda la información de ese día. Los investigadores han podido recoger “muchos datos”, pero “aún faltan algunos datos, en particular los relacionados con algunas de las desconexiones de generación que se produjeron antes del apagón”, expone el primer informe que han presentado este viernes en Bruselas y que se limita a exponer hechos sin llegar a conclusiones ni repartir responsabilidades. La caída eléctrica de hace casi medio año ha sido la mayor en los últimos 20 años, apuntan los investigadores, que prevén tener su documento final a comienzos de 2026 con “un análisis detallado de las causas fundamentales y consejos sobre cómo evitar que se produzcan eventos similares en el futuro en el sistema eléctrico europeo”.
Los problemas con la recopilación de datos han estado presentes casi desde el principio de la investigación. Y, de hecho, este informe sobre hechos, en el que se describe la metodología seguida, habla de que entre el pasado 28 de junio y el 12 de agosto, los investigaciones han intercambiado más de 150 correos electrónicos “con el objetivo de acabar el proceso de recogida de datos”. Sin embargo, ese proceso no ha podido finalizarse completamente porque, como apunta el propio documento, “varias de las partes interesadas (es decir, los propietarios de esas instalaciones) informaron al grupo de expertos de que no disponían de esos datos sobre registros de fallos”.
En este sentido, los investigadores ponen el acento en el documento publicado este viernes en la falta de información ofrecida por algunas empresas, que no dieron su consentimiento. “Aunque Red Eléctrica (el TSO español) obtuvo el consentimiento de 33 empresas de generación y DSO (en referencia a las distribuidoras Iberdrola, Endesa y Naturgy) para compartir datos relevantes, otras ocho no dieron su consentimiento”.
Ya a comienzos de junio, los investigadores europeos, coordinados por ENTSO-E, la organización europea que agrupa a los gestores de redes eléctrica, pidieron ayuda por carta al Gobierno español para que las grandes eléctricas le facilitaran datos, según avanzó este medio. Concretamente se dirigieron a la vicepresidenta tercera, Sara Aagesen, en la que le informaban “de la reticencia de los terceros a compartir los datos relevantes, lo que podría ocasionar posibles retrasos en la investigación del panel de expertos”. El argumento en el que se escudaban las eléctricas era “la confidencialidad a la que estarían legalmente obligados”.
La falta de información para la elaboración de este informe ha sido motivo de preguntas de los periodistas en la rueda de prensa que han ofrecido los expertos desde Bruselas. En este sentido, han señalado que tienen dudas de que puedan conseguirlo en el futuro, puesto que hasta el momento no han podido. Esos datos, han señalado, procederían de los dispositivos de protección y de los registros de fallos. Esto hace que algunas de las desconexiones que se produjeron en ese momento, si bien, han señalado que han podido reconstruir secuencias de forma indirecta.
Tras la presentación del informe, Red Eléctrica ha querido también subrayar dicha falta de información. “Red Eléctrica sigue a disposición del Expert Panel, con quien ha colaborado desde el inicio de la investigación respondiendo puntualmente a los requerimientos de información como se reconoce en el informe, que también constata dificultades a la hora de obtener datos de las terceras partes”.
El informe publicado hoy tenía por objeto hacer una recopilación de hechos de lo ocurrido en el histórico incidente de la península Ibérica hace ya casi seis meses. Las conclusiones son muy similares a las ya presentadas en junio tanto por el comité de expertos que formó el Gobierno como por la propia Red Eléctrica.
El problema se originó por desbalances de tensión y frecuencia, que llevaron a la desconexión en cadena de muchas plantas de generación desde el suroeste de España y que hizo imposible para el operador del sistema controlar la situación, de ahí que se fuera la luz en toda España. Los investigadores no ponen el acento tanto en que el causante fuera un exceso de renovables como que el incidente fuera provocado por el descontrol de la tensión.
En cualquier caso, los expertos señalan a las autoridades españolas, en referencia a la Comisión Nacional de los Mercados y de la Competencia (CNMC), como los encargados de repartir las responsabilidades, que aún siguen sin depurarse.
De cara al informe final que se presentará dentro de cuatro meses aproximadamente, el panel de expertos también “considerará el incidente en un contexto más amplio, examinando el comportamiento del sistema eléctrico ibérico en otros días anteriores al apagón”, detalla el texto publicado este viernes. Esta es una cuestión clave y muy reclamada por parte de las eléctricas, que quieren que se tenga en cuenta la sobretensión que sufría el sistema en días y meses previos, no sólo en el momento del incidente, como ha querido focalizar Red Eléctrica, el operador del sistema.
Desde Red Eléctrica ahondan en lo que consideran la principal causa del apagón: la operativa indebida de las centrales, que también se recoge en el documento presentado este viernes desde Bruselas. “En cuanto al comportamiento de la generación convencional en el control de las tensiones, el informe aporta diferentes gráficas por zonas del sistema español en las que se observa cómo la absorción de reactiva agregada de los grupos de más de 100 MW de potencia instalada se encuentra por debajo de la aportación requerida normativamente (P.O.7.4), muy especialmente en la zona suroreste y centro. Esto contrasta con el desempeño de las centrales en Portugal, donde los datos contenidos en el informe confirman que se ajustaron con precisión a sus requerimientos”.
El documento conocido este viernes vuelve a hacerse eco de las dos oscilaciones previas que se registraron en la media anterior al apagón. También recoge las medidas de mitigación que se adoptaron, como reducir la exportación de electricidad a Francia, lo que provocó un incremento de la tensión en la península. Además, también explica cómo se fue recuperando el funcionamiento de la red eléctrica que, señala, se logró en Portugal pasados 22 minutos de la media noche y en España sobre las cuatro de la madrugada.