Telefónica propone premiar con 200 millones a sus directivos si cumplen objetivos

El plan de incentivos a cinco años se dirige a 809 ejecutivos y está sujeto a criterios desde la cotización de la acción a la huella de carbono

José María Álvarez-Pallete, presidente de Telefónica.

Telefónica propondrá a la próxima Junta General de Accionistas la aprobación de un plan de incentivos a cinco años (2021-2025) para 809 directivos por un máximo de 200 millones de euros, consistente en la entrega de acciones de la compañía sujeta a la consecución de una serie de objetivos, que abarcan desde la revalorización de la cotización de la acción a la eliminación de emisiones contaminantes, según ha comunicado la empresa este jueves a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

El presidente de la compañía, José María...

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Telefónica propondrá a la próxima Junta General de Accionistas la aprobación de un plan de incentivos a cinco años (2021-2025) para 809 directivos por un máximo de 200 millones de euros, consistente en la entrega de acciones de la compañía sujeta a la consecución de una serie de objetivos, que abarcan desde la revalorización de la cotización de la acción a la eliminación de emisiones contaminantes, según ha comunicado la empresa este jueves a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

El presidente de la compañía, José María Álvarez-Pallete, en caso del cumplimiento del 100% de los objetivos del plan, recibiría en el primero de los tres ciclos del plan un total de 1.367.081 acciones que, con la cotización a cierre de la sesión del jueves (4,12 euros por título), estarían valoradas en 5,6 millones de euros. El consejero delegado, Ángel Vilá, es beneficiario de un máximo de 1.137.398 acciones en el primer ciclo, con un valor potencial de 4,68 millones de euros. En cualquier caso, el número de acciones a entregar dependerá de la asignación aprobada por el consejo de administración y del grado de cumplimiento de los objetivos del plan, según detalla la compañía en la convocatoria de la junta.

El plan tendrá una duración total de cinco años y se dividirá en tres ciclos de tres años de duración cada uno de ellos, es decir, con entrega de las acciones que correspondan en cada ciclo una vez transcurridos tres años desde el inicio de cada uno, independientes entre sí. El primer ciclo se inicia el 1 de enero de 2021 (con entrega de las acciones que correspondan en 2024); el segundo ciclo comenzará el 1 de enero de 2022 (con entrega de los títulos en 2025), y el tercero, el 1 de enero de 2023 (con entrega en 2026). Los importes comprometidos pero finalmente no utilizados de forma efectiva en cada ciclo (por incumplimiento de objetivos, bajas, etcétera) estarán disponibles para ciclos siguientes.

La entrega de acciones a los partícipes a la finalización de cada ciclo vendrá determinada en función del cumplimiento de objetivos económico-financieros, de creación de valor para el accionista, así como de objetivos ligados a la sostenibilidad, el medioambiente o el buen gobierno, según reza la convocatoria de la junta.

En concreto, el número de acciones a entregar dependerá de tres criterios: en un 50% del cumplimiento del objetivo del retorno para el accionista (total shareholder return o TSR) de la acción de Telefónica; en un 40% de la generación de flujo de caja libre del grupo, y en un 10% de la neutralización de emisiones de CO2, en línea con el objetivo marcado por la compañía para llegar a cero emisiones netas en el año 2025.

Se considera el TSR como la rentabilidad de la acción teniendo en cuenta la variación acumulada del valor de cotización de la acción de Telefónica, y los dividendos y demás conceptos similares percibidos por el accionista durante el primer ciclo del plan. Para determinar el cumplimiento del TSR y calcular el número de acciones a entregar por este concepto, se medirá la evolución del TSR de la acción de Telefónica, durante el periodo de duración del primer ciclo del plan, con relación a los TSRs alcanzados por las más relevantes compañías pertenecientes al sector de telecomunicaciones: Vodafone, América Movil, Deutsche Telekom, BT, Orange, Telecom Italia, Telenor, TeliaSonera, Swisscom, KPN TIM Brasil, Proximus, Millicom, Liberty y Altice.

Recorte del dividendo

Para determinar el cumplimiento del flujo de caja, se medirá el nivel generado por Telefónica durante cada año, comparándolo con el valor fijado en los presupuestos aprobados por el consejo de administración para cada ejercicio, con unos determinados baremos. Y, por último, para fijar el cumplimiento de emisiones de CO2 y calcular el número de acciones a entregar por este concepto, se medirá el nivel de reducción de emisiones en línea con el escenario 1,5 grados centígrados del Acuerdo de París y con el objetivo marcado por la compañía de cero emisiones netas para el año 2025 en sus cuatro principales mercados.

El plan de incentivos para directivos contrasta con la propuesta que también debe aprobar la Junta de Accionistas que se celebrará el próximo 23 de abril de una reducción en un 25% del dividendo a percibir por los accionistas en 2021, desde 0,40 hasta 0,30 euros mediante la modalidad de dividendo flexible voluntario (scrip). Un nuevo varapalo para el accionista de la operadora que vio cómo la cotización se desplomaba un 42,7% en 2020, aunque en lo que va de este año se ha recuperado un 25%.

Telefónica registró un beneficio neto de 1.582 millones de euros el año pasado, lo que supone un 38,5% más que en el ejercicio anterior, debido a los elementos extraordinarios que lastraron los resultados de 2019, pero los ingresos cayeron un 11% hasta los 43.076 millones.

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