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La UE y las Policías de América piden mayor cooperación para enfrentar al narcotráfico

El irector de la Policía Nacional de Colombia, general Rodolfo Palomino, habla durante una rueda de prensa luego de la presentación del informe "Análisis situacional del narcotráfico, una perspectiva policial" este 30 de septiembre de 2013, en Bogotá (Colombia).EFE

La lucha contra el narcotráfico requiere una mayor cooperación entre países, instituciones y empresas para poder afrontar un fenómeno que se expande en el mundo globalizado, alertaron hoy en Bogotá la Unión Europea (UE) y la Comunidad de Policías de América (Ameripol).

La cooperación debe involucrar también a los países usados por las mafias como punto de tránsito de las drogas que envían desde Suramérica hacia Estados Unidos y Europa, los grandes mercados consumidores, señalaron las dos organizaciones en la presentación del informe "Análisis situacional del narcotráfico, una perspectiv...

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La lucha contra el narcotráfico requiere una mayor cooperación entre países, instituciones y empresas para poder afrontar un fenómeno que se expande en el mundo globalizado, alertaron hoy en Bogotá la Unión Europea (UE) y la Comunidad de Policías de América (Ameripol).

La cooperación debe involucrar también a los países usados por las mafias como punto de tránsito de las drogas que envían desde Suramérica hacia Estados Unidos y Europa, los grandes mercados consumidores, señalaron las dos organizaciones en la presentación del informe "Análisis situacional del narcotráfico, una perspectiva policial".

"Durante muchos años aquellos países considerados de tránsito estimaban que el impacto sobre ellos no era mayor en razón a que ni producían ni consumían, sino que sencillamente (las drogas) pasaban por ahí, pero cada vez es más evidente ese arraigo y esa afectación de las mafias a aquellos países teóricamente neutrales", dijo a periodistas el director de la Policía Nacional de Colombia, general Rodolfo Palomino.

El documento, divulgado por la UE y la Ameripol, que preside Colombia, señala que los narcotraficantes, ante el acoso de las autoridades, han buscado nuevas rutas y formas para transportar la droga, y dentro de esa práctica utilizan cada vez más a África como puente entre América y Europa, así como los contenedores del comercio marítimo mundial.

Según la embajadora de la UE en Colombia, María Antonia van Gool, lo que más ha cambiado en los últimos años en el mundo del narcotráfico es la mayor utilización de contenedores para el envío de drogas, aprovechando el mayor dinamismo en el comercio mundial por la globalización.

"Ya no es el envío tradicional, que se puede detectar, (ahora) se envían cantidades más pequeñas (de drogas), de formas diferentes, y mucho en contenedores, que es difícil de detectar, porque los contenedores no se abren todos en los puertos", dijo Van Gool.

El método más utilizado en los puertos suramericanos, de donde sale la mayor parte de la cocaína mundial, es el "gancho ciego", que consiste en colocar drogas en los compartimentos de refrigeración de los contenedores, tras lo cual son sellados nuevamente.

Con este procedimiento los narcotraficantes "contaminan" los envíos legales de mercancías al exterior, modalidad que también se usa en los contenedores usados para guardar maletas en los vuelos internacionales, según el estudio.

El informe se basa en investigaciones de los cuerpos de Policía de Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador, Panamá y Perú, seis de los países que integran la Ameripol, como parte de un proyecto de cooperación con la UE coordinado por la Fundación Internacional y para Iberoamérica de Administraciones y Políticas Públicas (FIIAPP), del Gobierno de España.

En lo que tiene que ver con la ruta africana, el estudio señala que los países más usados para llevar drogas desde Suramérica a Europa son los de la parte occidental, en especial Ghana, Liberia, Malí, Nigeria, Senegal y Sierra Leona.

La inestabilidad política de los países de África occidental, la debilidad institucional, la pobreza, los altos índices de corrupción y la incapacidad de las autoridades para vigilar extensas fronteras y regiones costeras los convierten en territorios propicios para los traficantes de drogas, señala el estudio.

"La cooperación debe ser evidentemente nacional, regional, transregional y transcontinental y no solamente entre países y regiones de países", dijo la representante de la Unión Europea en Colombia.

Van Gool agregó que la cooperación debe servir para que las autoridades de los países productores entiendan la mentalidad de los países consumidores y viceversa, de manera que junto con las naciones usadas como punto de tránsito puedan entender mejor el problema y buscar fórmulas para enfrentarlo.

"Lo que estamos haciendo es no solamente el reconocimiento a esa corresponsabilidad que nos debemos en cualquiera de esos tres escenarios, sino también enviando un alerta al mundo, a la comunidad internacional para que frente al fenómeno de la drogas ilícitas, al narcotráfico, no haya indiferencia", explicó por su parte el general Palomino.