La banca rompe la racha y vuelve a pedir más dinero al BCE

Los bancos y cajas radicados en España rompieron la racha en abril al volver a aumentar la cantidad de dinero que piden prestada al Banco Central Europeo ante el rebrote de las dudas en los mercados de deuda. Según ha informado hoy el instituto emisor del euro, las entidades españolas incrementaron en un 2,6% su apelación a las facilidades de financiaci...

Los bancos y cajas radicados en España rompieron la racha en abril al volver a aumentar la cantidad de dinero que piden prestada al Banco Central Europeo ante el rebrote de las dudas en los mercados de deuda. Según ha informado hoy el instituto emisor del euro, las entidades españolas incrementaron en un 2,6% su apelación a las facilidades de financiación del organismo presidido por Jean-Claude Trichet hasta los 42.077 millones de euros.

Frente al total de dinero prestado por el BCE, también aumenta el volumen de crédito que va a parar a España con respecto al resto de países. Así, si en marzo este porcentaje bajó al 11,8%, en abril ha vuelto al 13%, con lo que supera ligeramente el peso del sistema financiero español en el conjunto de la eurozona, que es del 12%.

Pese al avance, los 42.077 millones solicitados suponen mantener los niveles previos a la crisis

Además, destaca que aumenta las peticiones de la banca española mientras el total de crédito cayó a su nivel más bajo desde 2004 con 320.481 millones, un recorte del 5,4% que se explica por el paulatino regreso a la normalidad en los mercados interbancarios, un proceso que los expertos atribuyen principalmente a la mayor actividad en los contratos de recompra.

La apelación de los bancos españoles al BCE ha ido pareja a la evolución de la crisis y al aumento de las dudas sobre la solvencia del país en los mercados de deuda. Así, este recurso, que ha servido a las entidades para mantener el -mermado- flujo del crédito a la economía en las peores fases de turbulencias, alcanzó un máximo el pasado junio en 126.300 millones tras dispararse frente a los meses anteriores.

La mayor dependencia a las medidas extraordinarias del instituto emisor, ya que el sistema español acaparó en aquel mes un cuarto del total del crédito del BCE, estuvo provocada por las dudas que despertaba la marca España en los mercados por el recrudecimiento de los problemas por el descalabro de Grecia. De hecho, las entidades que más dinero han pedido prestado al organismo a lo largo de la crisis fiscal del euro han sido las de los países bajo sospecha de los mercados por sus altos niveles de déficit y deuda, lo que llevó a Trichet a denunciar la "adicción" de algunos de estos bancos.

No obstante, tras la publicación de las pruebas de resistencia en julio y las medidas de reestructuración del sector financiero, la confianza volvió y la banca española pudo volver a los mercados tradicionales de financiación. En cualquier caso, pese al repunte registrado ahora en abril, tanto la cifra de capital prestado como el porcentaje que ha ido a parar a España en relación con el resto, se mantiene en niveles relativamente moderados. En concreto, el dato del pasado mes es, por detrás del de marzo, el segundo más bajo desde principios de 2008.

Para ello han tenido un papel destacado las Cámaras de Contrapartida, a las que las entidades han acudido para financiarse una vez que se abrió la veda y, tras las pruebas de resistencia a la banca, se volvieron a aceptar los títulos de deuda pública española en acuerdos de recompra (repos, en la terminología del sector). A través de estos acuerdos, la cámara asume el riesgo de que cuando llegue la fecha de recompra el vendedor no cumpla con su compromiso. La cámara cubriría entonces la diferencia entre el valor del título de deuda pública en el mercado y el valor acordado de recompra. A cambio, cobra una tasa anual a los participantes en la cámara y una comisión al vendedor (la entidad que se financia) en cada operación.