Cuenta atrás para las fábricas de Indo

El futuro de la firma catalana pasa por encargar la producción a terceros y centrar la actividad de la empresa en el diseño de los productos y en darles valor añadido

Indo, el fabricante catalán de gafas y lentes, tiene vocación de dejar de ser fabricante de gafas y lentes. "Son los mercados los que nos empujan a un cambio de modelo de negocio". Juan Casaponsa, presidente del grupo, con sede en Sant Cugat del Vallès (Barcelona), lo ha dejado claro esta mañana con estas palabras, al poder sacar pecho sobre los resultados del tercer trimestre, que supusieron un recorte de las pérdidas del 77%.

El camino que seguirá la compañía, que se ha ido transformando en los últimos años en un intenso proceso de internacionalización y que cada vez emplea a menos p...

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Indo, el fabricante catalán de gafas y lentes, tiene vocación de dejar de ser fabricante de gafas y lentes. "Son los mercados los que nos empujan a un cambio de modelo de negocio". Juan Casaponsa, presidente del grupo, con sede en Sant Cugat del Vallès (Barcelona), lo ha dejado claro esta mañana con estas palabras, al poder sacar pecho sobre los resultados del tercer trimestre, que supusieron un recorte de las pérdidas del 77%.

El camino que seguirá la compañía, que se ha ido transformando en los últimos años en un intenso proceso de internacionalización y que cada vez emplea a menos personas en España, pasa por encargar la producción a terceros y centrar la actividad de la empresa en el diseño de los productos y en darles valor añadido. Esta estrategia supone un auténtica cuenta atrás para las fábricas no sólo de Tailandia y de China, sino, sobre todo, para la de Tortosa, en Tarragona, que emplean en total más de 200 pesonas. "No hay fecha de cierre para Tortosa", subrayó Casaponsa, pero "el valor hoy es el diseño".

Éste es el horizonte que se dibuja para una empresa que "ha hecho los deberes", según su director financiero, Xavier Tintoré, en alusión a la reestructuración y recorte de costes acometido.

Hay buenas noticias

La compañía, que realizó un expediente de regulación para 132 personas, tiene tres buenas noticias por las que felicitarse: la primera, la alianza con el grupo japonés Hoya, que ha supuesto un intercambio y suministro de tecnología y producto; la segunda, la refinanciación de la deuda de la empresa (ahora el 75% es a largo plazo) y la obtención de liquidez, con un crédito del Instituto Catalán de Finanzas (ICF) de ocho millones de euros.

Las ventas han seguido reduciéndose, y mucho (un 22,8% hasta septiembre), pero a un ritmo menor que a principios de año. Indo sigue perdiendo dinero (2 millones de euros en los nueve primeros meses del año) pero en el mismo periodo del año anterior, los números rojos eran de 8,9 millones.