Reportaje:TENIS | Abierto de Australia

En el 'top 10' de las leyendas

El mallorquín se convierte en el séptimo tenista con más finales del Grand Slam: 15

En Australia, tierra lejana, Rafael Nadal busca su lugar en la historia. Aquí, en el grande de las antípodas, el más exótico, el más mágico, uno que solo ha visto a seis españoles en el partido decisivo -Andrés Gimeno, Joan Gisbert, Carlos Moyà, Arantxa Sánchez Vicario, Conchita Martínez y él mismo-, el mallorquín se adentra en terrenos desconocidos.

Vuelan los cohetes. Resuenan los tambores. Es el día de Australia y su victoria sobre el suizo Roger Federer permite a Rafael Nadal colocarse séptimo en el top 10 de los tenistas que más finales grandes han disputado en la historia (...

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En Australia, tierra lejana, Rafael Nadal busca su lugar en la historia. Aquí, en el grande de las antípodas, el más exótico, el más mágico, uno que solo ha visto a seis españoles en el partido decisivo -Andrés Gimeno, Joan Gisbert, Carlos Moyà, Arantxa Sánchez Vicario, Conchita Martínez y él mismo-, el mallorquín se adentra en terrenos desconocidos.

Vuelan los cohetes. Resuenan los tambores. Es el día de Australia y su victoria sobre el suizo Roger Federer permite a Rafael Nadal colocarse séptimo en el top 10 de los tenistas que más finales grandes han disputado en la historia (15), superando al estadounidense Bill Tilden, e igualando a los estadounidenses Jimmy Connors y Andre Agassi, y al australiano Roy Emerson. Por delante de Nadal, en la lista de ilustres con más finales, están Bjorn Borg y Ken Rosewall (16), Rod Laver (17), Pete Sampras (18), Ivan Lendl (19) y el propio Roger Federer que lidera el ranking con 23.

Si gana, sumará 11 títulos grandes, tantos como Rod Laver y Björn Borg
En Melbourne, el español disputará su cuarta gran cita consecutiva
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Si el mallorquín gana, sumará 11 títulos del Grand Slam, tantos como el australiano Rod Laver, los mismos que el sueco Bjorn Borg. La obra del español, sin embargo, es más plural que la de ambos. Laver gobernó cuando tres de los cuatro grandes eran en hierba. Borg dio vida a un doblete imposible, el de mandar sobre la tierra de Roland Garros y el césped de Wimbledon en seis semanas, pero nunca se graduó en pista rápida. Nadal es un campeón todoterreno. Acumula más de un grande sobre hierba (Wimbledon en 2008 y 2010), tierra (seis Roland Garros: 2005, 2006, 2007, 2008, 2010 y 2011) y cemento (Australia en 2009 y Estados Unidos en 2011). Como mínimo, ha alcanzado un par de finales en los cuatro grandes.

Aquí, en Melbourne, vivió el español un momento liberador: conquistó su primer título del Grand Slam sobre pista rápida. Aquí, entre los cohetes, disputó su décimo duelo en un grande contra Federer (con un balance de 8-2 a favor del mallorquín), igualando el récord de Ivan Lendl y John McEnroe.

Aquí, en una ciudad alegre, juega su cuarta final grande consecutiva tras las de Roland Garros, Wimbledon y Abierto de Estados Unidos en 2011. Ocurre como con Federer. Desde ya, cada paso que de Nadal queda para la historia.

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