El Plan Integral de Residuos estará antes de finalizar el año
La consejera de Infraestructuras y Transportes, Isabel Bonig, se comprometió ayer en Alicante a que antes de acabar el año estará concluida la tramitación del nuevo Plan Integral de Residuos (PIR), que recibió miles de alegaciones en el periodo de información pública que concluyó a finales del pasado mes de junio y que está pendiente de la aprobación provisional de la consejería y la definitiva del Consell.
Bonig ha pedido a la oposición que se avenga a cerrar un pacto sobre la materia, a pesar de que el actual plan se aprobó por decreto en diciembre de 1997 -tres años antes de entrar e...
La consejera de Infraestructuras y Transportes, Isabel Bonig, se comprometió ayer en Alicante a que antes de acabar el año estará concluida la tramitación del nuevo Plan Integral de Residuos (PIR), que recibió miles de alegaciones en el periodo de información pública que concluyó a finales del pasado mes de junio y que está pendiente de la aprobación provisional de la consejería y la definitiva del Consell.
Bonig ha pedido a la oposición que se avenga a cerrar un pacto sobre la materia, a pesar de que el actual plan se aprobó por decreto en diciembre de 1997 -tres años antes de entrar en vigor la Ley de Residuos de la Comunidad Valenciana- y 14 años después solo se ha ejecutado o está en vías de ejecución el 70% del mismo, según manifestaciones de la propia consejera. Bonig incluyó en ese porcentaje la planta de Cervera del Maestre, que comenzará a testarse a finales de este año o las de Manises y Llíria, que arrastran años de retraso y todavía están en construcción.
La línea 2 del TRAM
En su visita a la Diputación de Alicante, donde Bonig se reunió con su presidenta, Luisa Pastor, la consejera tampoco pudo concretar la fecha de entrada en funcionamiento de la línea 2 del TRAM que llega hasta la Universidad de Alicante, reclamada con insistencia por los sindicatos, los vecinos y los partidos de la oposición desde que fue inaugurada en la pasada precampaña electoral.
La consejera aludió una vez más a la complejidad del pliego de condiciones que se encontró tras su llegada al Gobierno valenciano y comentó que no llevan "tantísimo retraso" porque "lo importante es que la inversión [de más de 100 millones de euros] está hecha". La entrada en funcionamiento de esta línea supondría la eliminación de un 22% del tráfico de coches entre Alicante y Sant Vicent del Raspeig.
La indefinición de la consejería ha obligado al Ayuntamiento de Alicante a tomar medidas. A partir del lunes que viene, la línea 24 de autobús, que tiene como final de trayecto la universidad, se reforzará para mejorar el servicio. Esta línea es una de las de mayor demanda en la ciudad y da servicio a más de 15.000 personas al mes. Desde la semana que viene, la línea 34 cambiará su recorrido para atender las paradas que más demanda tienen hasta el final del trayecto y poder trasladar más universitarios.