La Jaume I frena obras para ahorrar
La Universidad Jaume I (UJI) de Castellón no iniciará este curso las obras de rehabilitación del antiguo edificio de Hacienda ni la de los antiguos juzgados de Castellón. Tampoco la reforma de la casa forestal de Vistabella. Todas estas obras han sido paralizadas en función de un plan de contención aprobado para este año que incluye, además, la reprogramación de otras infraestructuras. Entre estas, la Facultad de Ciencias de la Salud que, con el aplazamiento del pago de los 13,6 millones que el Consell adeuda a la UJI, no se prevé que se concluya hasta 2015, un curso más tarde de lo esperado. ...
La Universidad Jaume I (UJI) de Castellón no iniciará este curso las obras de rehabilitación del antiguo edificio de Hacienda ni la de los antiguos juzgados de Castellón. Tampoco la reforma de la casa forestal de Vistabella. Todas estas obras han sido paralizadas en función de un plan de contención aprobado para este año que incluye, además, la reprogramación de otras infraestructuras. Entre estas, la Facultad de Ciencias de la Salud que, con el aplazamiento del pago de los 13,6 millones que el Consell adeuda a la UJI, no se prevé que se concluya hasta 2015, un curso más tarde de lo esperado. La Casa del Estudiante y la urbanización de las parcelas del Parque Científico, Tecnológico y Empresarial son otras obras sacrificadas.
En cuanto al antiguo edificio de Hacienda, desde la universidad explicaron que la paralización no afecta al pago de los tres millones del IBI al Ayuntamiento de Castellón para que este los reinvierta en la rehabilitación de las zonas comunes que ambas instituciones compartirán.
Esta semana el consejo social de la UJI abordó la modificación del convenio con la Consejería de Educación para la financiación de los gastos corrientes y de inversión, lo que supone que el Consell no pagará hasta 2014 los seis millones de euros que debía abonar este año, ni hasta 2015 los otros seis millones de 2012. El resto de la deuda correspondiente a estas anualidades (1,6 millones) no se dará por zanjada hasta 2022, año en el cual la universidad debería haber recibido ya el total de 98 millones de la deuda de la Generalitat.
La UJI se ha visto obligada a agilizar nuevos recortes y prepara un plan de austeridad de cara a 2012 que se sumará al plan de contención aplicado este año.